Ideas eficaces con productos que guardas en tu despensa, para conseguir una casa reluciente, en tiempo récord y a bajo coste.
Convierte la limpieza del fin de semana en un espacio ecológico por excelencia. Y para ello nos metemos en la cocina a la busca y captura del mejor limpiador. Nuestro hit parade de sustancias eco-friendly está formado por bicarbonato, vinagre, limones, alcohol y hojas de té. ¿En qué cocina no encontramos todo esto?
Campanas extractoras, tapicerías que necesitan un buen repaso, esas zapatillas que «cantan» demasiado, ropa de cama un poco más tiesa de lo deseable,
cristales algo opacos y espejos que no reflejan lo que debieran son nuestros objetivos. Y si también son los tuyos, has llegado a la sección adecuada.
EMPEZAMOS POR LOS ESPEJOS
¡Nos gustan los espejos brillantes y sin vaho! Para ello utilizaremos este estupendo limpiador casero: mezcla en un bote con pulverizador dos terceras
partes de agua con una de vinagre blanco. Empapa papel de periódico arrugado con ella, retira la suciedad y seca con un paño de algodón.
Las huellas de dedos se eliminan diluyendo alcohol en agua en un recipiente. Se rocía sobre el cristal y se limpia con papel de periódico. Para manchas oscuras este es nuestro remedio: poner un cazo con agua al fuego. Cuando rompa a hervir, añadir hojas de té. Dejar unos 5 minutos y retirar del fuego. Agregar la
mezcla a una botella con pulverizador.
Aplicar caliente sobre un paño y frotar la mancha hasta que desaparezca.
LA CRISTALERÍA
Y seguimos con los destellos. ¿Quieres que tu cristalería brille como el primer día, eliminando esas manchas blancas provocadas por la dureza del agua?
Llena una olla grande con agua hirviendo y añade dos vasos de zumo de limón y otros dos de vinagre blanco. Mete la vajilla y deja una hora.
TEXTILES
Turno de las tapicerías. Limpia tu sofá de tela con una mezcla de 1/2 taza de agua, un vasito de alcohol, medio de zumo de limón y 1 cucharada de detergente líquido. Rocía, cepilla y pasa un paño húmedo.
ROPA DE CAMA
Cómo guardar y limpiar la ropa de cama. Antes de estrenar sábanas, lávalas para eliminar posibles sustancias químicas de la fabricación. Si son de algodón, hazlo en agua fría para que no encojan.
Tras su uso, elimina manchas, poniendo la temperatura de la lavadora entre los 40 y 60º C. Con el uso puede que se pongan amarillas. Recupera su blanco original, añadiendo media taza de limón o de bicarbonato al detergente habitual.
LA COCINA Y SU CAMPANA EXTRACTORA
Comienza la limpieza de la campana extractora extrayendo los filtros y metiéndolos en un barreño con disolvente de grasa y bicarbonato y dejándolos durante 20 min. Mientras tanto, limpia el interior con agua caliente, disolvente de grasa y bicarbonato o vinagre y un estropajo. Si es de acero inoxidable, limpia con agua caliente y esponja. Para las manchas más difíciles crea una pasta espesa con bicarbonato y agua. Aplica y deja actuar media hora. Pasa un paño, enjuaga y seca.
EL CALZADO
Y sí: le toca a las zapatillas. Es recomendable lavar las zapatillas de deporte a mano para que no se deformen. Para el interior, mezcla un poco de agua con
unas gotas de detergente líquido y una pizca de bicarbonato. Deja actuar 15 min y retira. Para el exterior, basta con agua y jabón.