Productores esperan lluvias para mejorar los nacimientos.
Las siembras de arroz, tanto en la cuenca del norte (Artigas, Salto, Tacuarembó y Rivera) como en el Este (Cerro Largo, Treinta y Tres, Rocha y parte de Lavalleja) están muy avanzadas.
Se estima que en el norte, como todos los años, el avance de siembra siempre es un poco mayor al registrado en los departamentos de la cuenca tradicional, pero todavía no hay datos muy concretos. Es más, ese mayor avance estaría comenzando a ser escalonado por los productores.
Alfredo Lago, cultivador independiente de Treinta y Tres y ex presidente de la Asociación Cultivadores de Arroz (ACA) hace algunos años atrás, estimó ayer a El País que en los departamentos del este se llevaría plantado “alrededor del 35% del área estimada”, superficie que “para la fecha es bastante”.
El arroz tiene una fecha óptima de plantado que va entre el 15 de octubre y mediados de noviembre, lo que sumado a una buena liminosidad y calor durante febrero, permita redundar en buenos rindes como el logrado el año pasado (arriba de 8.500 kilos por hectárea).
Los arroceros comenzaron prácticamente sembrando en el barro, pero ahora ya están plantando en un suelo que precisa mayor grado de humedad para favorecer el nacimiento de las plantas.
El área a nivel país todavía no está muy clara, pero la estimación es de 160.000 hectáreas, cuando el año pasado alcanzó las 162.000 hectáreas.
“Hay una leve tendencia a la baja pero el área será bastante similar. El clima está permitiendo un avance importante de siembra y eso puede favorecer a que se llegue al área del año pasado”, estimó Lago.
La falta de humedad y las temperaturas bajas para la época, porque la primavera no termina de instalarse, están complicando los nacimientos de los cultivos plantados. “Normalmente las siembras de estos primeros días de octubre llevan unos 15 días para emerger.
Esperemos que ande en ese entorno y que llueva esta semana como se estaba pronosticando “, dijo Lago.
En cuanto a los costos, los productores estiman que serán muy similares a los registrados el año pasado, principalmente debido a la depreciación del dólar, por lo que manejar alrededor de US$ 1.800 por hectárea parecería ser razonable.
En los últimos años, dentro de los costos, lo que subió fuerte es el agua, incluso por encima del precio de los arrendamientos. Según los datos de la Dirección de Estadísticas Agropecuarias (DIEA/MGAP) el pago conjunto por tierra y agua en la producción arrocera -en el total del país- en la zafra 2002/03 era de 25,7 bolsas de arroz por hectárea (1,285 kilos del cereal por hectárea), pasó a 26,5 bolsas (1,325 kilos) en la zafra 2005/06, llegó a 29,9 bolsas (1.495 kilos) en 2011/12 y en la zafra 2013/14 alcanzó las 30,7 bolsas (1.535 kilos).
El año pasado fue un año difícil para el sector que logró mantenerse de pie y apuesta a seguir avanzando.
Fuente: El País