Como senador más votado, José Mujica eventualmente podría tener que tomarle juramento a Luis Lacalle Pou como presidente.
Las elecciones del 27 de octubre consagraron por quinta vez consecutiva al Frente Amplio como el partido político más votado del Uruguay. También determinaron que el sector con más apoyo en la coalición sea, nuevamente, el Movimiento de Participación Popular.
Y allí, el primer senador electo fue José Mujica, al que las normas constitucionales vuelven a asignarle un papel relevante, aunque complejo, en la vida institucional del país.
El 15 de febrero de 2020 y como titular de la lista más votada del lema más votado, al ex presidente le tocará encabezar la nueva Asamblea General. Será hasta el 1 de marzo, cuando asuma el nuevo gobierno.
La principal misión de Mujica allí será, ese día, tomarle el juramento de estilo al presidente de la República que empiece su gestión. Sea cual sea el mandatario electo.
Así, podría darse el caso que el ex presidente deba tomarle juramento a Luis Lacalle Pou, representante de un partido diferente al de la primera mayoría parlamentaria.
Una circunstancia que registra un solo antecedente directo. En 2000, Jorge Batlle debió prestar juramento ante el entonces primer titular del partido más votado, el frenteamplista Reinaldo Gargano (PS).
La ubicación institucional de Mujica, con todo, dependerá de cuál sea el presidente a partir de ese día.
Si es Daniel Martínez, el ex mandatario pasará a ser, como el primer senador del oficialismo, el “número tres” en la sucesión presidencial y, eventualmente, volver a ocupar la primera magistratura.
El artículo 155 de la Constitución indica que, ante vacancia definitiva o temporal de la Presidencia de la República, o en razón de licencia, renuncia, cese o muerte del presidente y del vicepresidente, deberá
desempeñarla el senador primer titular de la lista más votada del partido político por el cual aquellos fueron electos.
La condición de que pertenezca al mismo lema que el presidente y el vice fue agregada en la reforma constitucional de 1997, al instaurarse la segunda vuelta electoral.
Una disposición que excluirá a Mujica y a todos los senadores del Frente Amplio de la sucesión presidencial si el presidente electo resulta ser Luis Lacalle Pou.
Allí, el “número tres” le correspondería a Aire Fresco (Lista 404), el más votado en el nacionalismo. Alli el primer candidato era el propio Lacalle Pou, por lo que debería asumir como senador su primer suplente, el actual
intendente de San José, José Luis Falero.
Pero como la Constitución habla de senadores electos como titulares, la sucesión inmediata recaería en Álvaro Delgado.
La excepción la constituye la Comisión Permamente, que sesione fuera de los períodos ordinarios del Poder Ejecutivo. En los próximos cinco años, siempre será presidida por un legislador del Frente Amplio.