LA PLUMA Y LA ESPADA
El Ministerio de Educación y Cultura (MEC) ha anunciado el comienzo de la celebración por el centenario del nacimiento de Emir Rodríguez Monegal (28 de julio de 1921, Cerro Largo -14 de noviembre de 1985,
Connecticut). A través de la campaña de comunicación La pluma y la espada, se invita a redescubrir la vida, obra y pensamiento de este crítico literario uruguayo, considerado uno de los más importantes del habla hispana.
Junto con los equipos de la Biblioteca Nacional de Uruguay (BNU), la Dirección Nacional de
Cultura, el Archivo General de la Nación, los medios públicos, el Archivo Nacional de la Imagen y la Palabra del Sodre, la Dirección de Educación y la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación, exploraremos su legado, dice una comunicación del MEC Difundiremos las publicaciones Mundo Nuevo y Número, ambas dirigidas por Emir Rodríguez Monegal y digitalizadas en la BNU junto a otras revistas en las que colaboró y el volumen 211
de la colección de Clásicos Uruguayos Ensayo y Memoria de Rodríguez Monegal. Está previsto, además, que la próxima edición de la revista de la BNU esté dedicada a su figura, con la participación de investigadores
nacionales y extranjeros.
La Dirección de Educación, a través del Departamento de Documentación Pedagógica, recomendará sus textos, disponibles en su biblioteca de acceso público.
La Dirección Nacional de Cultura, en coordinación con la Universidad de Princeton, en Nueva Jersey, donde se encuentra su archivo literario, está organizando una exposición con este material.
En los próximos meses realizaremos dos mesas redondas a cargo de expertos nacionales e internacionales, estudiosos de la obra de Rodríguez Monegal y de su legado, entre los que participará su hijo, Joaquín Rodríguez.
Una de estas mesas se realizará en Cerro Largo, departamento natal de Emir Rodríguez Monegal.
Sobre Emir Rodríguez Monegal Fue uno de los críticos literarios más importantes del habla hispana. Referencia en Uruguay, en América Latina, Estados Unidos y París. La investigadora Ana Inés Larre Borges lo describe como
«el árbitro de la literatura uruguaya» de esa época.
Colaboró en el semanario Marcha a partir de 1943 y dirigió su página literaria desde 1944 a 1959. También colaboró en las revistas Escritura, Clinamen, Film, Maldoror (Montevideo), Sur (Buenos Aires), Plural y Vuelta (Ciudad de México), Eco (Bogotá), Revista Iberoamericana (Pittsburgh), en El País y Jaque (Montevideo), entre otras numerosas publicaciones periódicas.
Fue cofundador y redactor responsable de la revista Número, en Montevideo; fundó y dirigió Mundo Nuevo, en París. Profesor de literatura en el Instituto de Profesores (Montevideo), fue designado profesor de Literatura Iberoamericana en la Universidad de Yale, New Haven.
En Estados Unidos pasó las últimas dos décadas de su vida, enseñando literatura latinoamericana en esa Universidad.
A pesar de la extrema gravedad del mal que le aquejó, quiso y logró regresar a Montevideo, donde reencontró lectores y amigos, dio conferencias y entrevistas. Volvió a New Haven para morir en el hospital de Yale pocos días después, en noviembre de 1985.