Mantener el sistema inmune en buen estado y unas defensas fuertes nos permite prevenir el desarrollo de ciertas enfermedades y plantarle cara
a aquellas que empiezan a manifestarse en nuestro organismo.
Por qué se debilita el sistema inmunológico Alimentación inadecuada: El déficit de proteínas, vitaminas o minerales, así como el exceso
de carbohidratos afectan directamente al funcionamiento del sistema inmune.
Poca actividad: La falta de movimiento o la nula realización de actividades físicas moderadas, por lo menos dos veces por semana, es una forma rápida de debilitar tus defensas.
Un mal descanso: no dormir las horas recomendadas (entre 7 y 8 al día) y no tener un descanso óptimo y una buena higiene del sueño produce que
las defensas del sistema inmunológico bajen.
El estrés: una sobrecarga de tensión puede transformarse en patologías más graves como la ansiedad, la depresión o, incluso, una trombosis.
Mantener las situaciones de estrés en tiempo prolongado puede incidir en la depresión del sistema inmunológico.
Alimentos para subir las defensas
La alimentación es la base para mantener un sistema inmunológico fuerte y sano. Por ello y para conseguir subir las defensas de forma natural es
importante incorporar alimentos que nos aporten los nutrientes necesarios y que favorezcan las células de defensa del organismo
de manera más eficiente.
Estos son algunos de los mejores alimentos para subir las defensas:
Productos con Omega 3: atún, salmón, sardinas, nueces, semillas de chía y linaza.
Alimentos ricos en vitamina C: naranja, mandarina, limón, piña, mango, melón, sandía, fresas, kiwi, tomate, brócoli, repollo, etc.
Alimentos con vitamina A: zanahoria, espinacas, acelgas, remolacha o huevo.
Alimentos ricos en vitamina E: aceite de oliva y de girasol y frutos secos como las avellanas, los cacahuetes, los pistachos o las almendras.
Productos que contengan zinc: pollo, pavo, carne roja de ternera, ostras, germen de trigo y granos integrales, semillas de calabaza y pescado.
Alimentos con selenio: arroz, pollo, queso, harina de trigo, semillas de girasol, etc. Probióticos naturales: yogur natural y kéfir.
Además de introducir estos alimentos en tu dieta, es importante evitar la comida procesada, azúcares refinados, alcoholes y cafeína, pues son muy
perjudiciales y debilitan el organismo.
Vitaminas para subir las defensas
Mantener el cuerpo con buenos niveles de vitaminas es fundamental para reforzar el sistema inmunológico de forma natural. Pero ¿cuáles son
las vitaminas más necesarias para mantener el sistema inmune fuerte? Estas son las siguientes: Vitamina C: es la más esencial, pues ayuda directamente al buen funcionamiento del sistema inmunológico. La fruta estrella donde podrás encontrar esta vitamina es en la naranja, no obstante, también la puedes consumir a través de complementos alimenticios.
Vitamina B3: esta vitamina es hidrosoluble, es decir, se disuelve en el agua, por lo que se puede perder una gran propiedad si cocinas alimentos que
las contengas. Por ello, tomarla a través de complementos alimenticios permitirá que las mucosas se encuentren en condiciones normales, una de
las principales funciones de las vitaminas tipo B.
Vitamina D: este tipo de vitamina ayuda a absorber el calcio, ya que es liposoluble, y junto al fósforo permite mantener los huesos fuertes, una gran
defensa de nuestro sistema inmunitario. La vitamina D se produce en el organismo a través de la luz del sol, aunque también la encontrarás en pequeñas
dosis en algunos alimentos y como complemento. Cuidar tu cuerpo, llevar una vida sana y evitar, en la medida de lo posible, todo aquello perjudicial
para tu organismo te permitirá mantener un sistema inmunológico fuerte con unas defensas altas y listas para combatirlo todo.