La Organización Panamericana de la Salud cifra en unos 570.000 el número de trabajadores sanitarios infectados. Unas tres cuartas partes de los diagnosticados con la enfermedad son mujeres. Estados Unidos y México suman casi el 85% de todas las muertes por COVID-19 de estos profesionales en la región.
El costo humano de la pandemia en América continúa alto con casi 4000 muertes al día.
El continente americano es la región con el mayor número de casos de COVID-19 entre los trabajadores sanitarios, alertó este miércoles la Organización Mundial de la Salud durante su encuentro semanal con los medios de comunicación.
«Nuestros datos muestran que se han enfermado casi 570.000 trabajadores de la salud en toda nuestra región y más de 2500 han sucumbido al
virus. Basándonos en estos datos, hasta la fecha, tenemos el mayor número de trabajadores de la salud infectados en el mundo», advertía la directora de la Organización Carissa Etienne.
A modo de ejemplo, explicó que en Canadá los trabajadores de la salud representan más de un cuarto de todos los casos reportados de
COVID-19, mientras que en Estados Unidos y México suman casi el 85% de todas las muertes por COVID de estos profesionales en la región.
Del mismo modo, destacó que casi tres cuartas partes de los trabajadores de la salud diagnosticados con COVID-19 en la región son mujeres, una cifra que arroja la cuestión sobre por qué hay tantos trabajadores infectados.
Etienne, atribuyó las cifras a la falta de entrenamiento del personal, a los hospitales abarrotados de pacientes y a la falta de equipos de protección
personal, entre otros motivos.
«Es por ello por lo que le pido a los países de las Américas que tomen las medidas necesarias para brindarles a nuestros trabajadores de salud la protección y la tranquilidad que se merecen ahora y en el futuro», dijo Etienne.
Casi 4000 muertes diarias en la región Pese a que se ha estabilizado el número de casos de COVID-19 en Brasil y en Estados Unidos, ambas naciones continúan reportando el mayor número de nuevos casos a nivel global.
En el Caribe se indica la tendencia contraria con un incremento del virus, mientras que, en América central, excepto en Costa Rica y Nicaragua que informaron sobre la cifra más alta de casos en un día, se experimenta una tendencia a la baja durante la última semana.
En América del Sur, Chile y Uruguay consiguieron aplanar la curva gracias al control efectivo de la infección, pero Etienne alertó que el costo humano de esta pandemia sigue siendo inaceptablemente alto con casi 4000 muertes al día en la región.
México evoluciona favorablemente Cuestionado sobre la previsión de la OPS de que México alcanzaría el pico de casos en agosto, el doctor Ciro Ugarte, director de emergencias de salud, destacó que México es un país muy extenso y que la pandemia tiene diferentes grados de transmisión y de número
de casos y fallecidos por Estados.
«Esta semana un Estado está en semáforo rojo, veintiuno en naranja y diez en amarillo. Esto significa que hay una evolución positiva en algunos indicadores relevantes como la tendencia de número de casos, en ocupación de camas hospitalarias, cuidados intensivos, tasa de positividad de los exámenes, entre otros»,
detalló.
Ugarte recordó que México cambió la definición de caso sospechoso de infección respiratoria aguda con el objetivo de captar más casos. El experto recomendó al país norteamericano, y a todos los países con tendencia a la reducción de casos, extremar las medidas de precaución.
«Hay que mantener el distanciamiento físico, el uso de la mascarilla, la desinfección de manos.
Es también preciso identificar tempranamente que una persona tenga sintomatología compatible con COVID, iniciar el aislamiento de las personas sintomáticas y la cuarentena de los contactos, contactar a los servicios (de salud) para iniciar el tratamiento adecuado y hacerla prueba correspondiente».
Estados Unidos se desmarca de la iniciativa COVAX Respecto al reciente anuncio de que Estados Unidos no participará en la cartera COVAX, una
iniciativa de la Organización Mundial de la Salud para desarrollar y proveer el acceso equitativo mundial a una vacuna contra el COVID-19, el doctor
Marcos Espinal, director del departamento de enfermedades transmisibles, emplazó a la potencia norteamericana a reconsiderar su situación «Si un donante no está presente por supuesto esto va a tener un impacto. Aunque cada país es soberano y puede tomar sus propias decisiones, animamos a Estados Unidos a reconsiderar y participar en la COVAX, ya que es un bien público mundial que llevará vacunas a las personas que las necesitan en muchos países, no sólo en esta región, pero también en África y Asia», destacó.
Regreso a las aulas durante la pandemia Ante la pregunta de si Venezuela está preparada para el regreso de los estudiantes a los centros de enseñanza y qué recomendaría la OPS para la protección de estudiantes y maestros, el doctor Ugarte, dijo que, en un contexto de transmisión comunitaria, la concentración de personas de diversas edades crece la probabilidad de transmisión.
Ugarte indicó una serie de principios generales para cualquier país que empiece la apertura de los centros de enseñanza. «Si los colegios se van a abrir, implementar medidas específicas de ventilación de los ambientes, de distancia entre los escolares, el uso de protectores faciales, contar con lugares para desinfección de manos, tener lugares donde alternar las clases presenciales y establecer protección para los maestros, en particular los que tengan un riesgo mayor», enumeró.
Destacó que, tras la apertura de colegios, en general, se incrementa el número de casos por lo que recomendó prepararse para esta situación y
tomar las medidas inmediatas para la reducción de transmisión en los centros educativos y dar acceso a las pruebas de diagnóstico.
Incertidumbre ante los cambios estacionales Al ser cuestionado por la llegada de la primavera y el verano en los países del sur y si la llegada del invierno en los del norte podría suponer un retroceso que agrave la situación, el doctor Espinal destacó la imprevisibilidad ante los cambios de temporada.
«No podemos descartar que en el invierno haya otro pico en el norte en países que ya tuvieron su primera onda, pero tampoco en el sur se puede descartar porque hemos visto en países muy tropicales, como la República Dominicana, que en el verano también han reportado muchísimos casos. Hay que esperar y
ver qué pasa», dijo.
Con relación a Brasil destacó que la curva disminuye, pero no está plana y que el país sudamericano «no está fuera del problema» ya que durante los dos últimos días se reportaron entre 42.000 y 45.000 casos.
ONU