«Me fui 20 años por la discriminación que viví aquí… Hoy soy la representación de que todo se puede y que somos personas normales como cualquier otra, tenemos muchas cosas para darle a la sociedad», Alejandra Da Rosa primer edila trans del país electa en las elecciones departamentales de setiembre pasado.
Alejandra Da Rosa en el 2019, fue candidata diputada por el Frente Amplio, desde el sector de Constanza Moreira. En este 2020, en las elecciones departamentales, integró la lista 609 como suplente, y con la obtención de votos en esta instancia electoral, obtiene una banca en la junta departamental, a la cual Alejandra Da Rosa accede como edila suplente.
En consecuencia, será la primera edila trans en los 100 años de la Junta Departamental de Tacuarembó, y en la historia legislativa del país.
Es militante del colectivo LGBTIQ+, presidenta del Colectivo Unión Diversa Tacuarembó, integra la Asociación trans del Uruguay, tiene su propio salón de belleza, lugar que disfruta de su trabajo y el contacto diario con sus clientes/as y amigos/ as.
¿Cómo decidís estar en política?
—La propuesta llegó a través de Constanza Moreira, se hizo una alianza con la lista 609, por eso ingresamos en la Junta Departamental. Comencé siendo candidata a diputada en primera instancia, ahora a edil. Hemos trabajados mucho, teniendo mucho contacto con la gente. El contacto ha sido reciproco, he recibido muchos mensajes.
Estoy agradecida. Para Tacuarembó hay un antes y un después de este momento.
¿Cuál es el análisis de la baja votación del Frente Amplio en el departamento?
—Hay muchas cosas para cambiar, para trabajarlas y seguir luchándola para que el Frente Amplio crezca. Para mí es un primer escalón, quiero enfocarme en trabajar por la gente y mi partido ¿Cuál será la impronta que podrás en tu gestión como edila?
—Por supuesto que estaré defendiendo los derechos de las mujeres, de mi colectivo, con la agenda de la diversidad presente. Estaré atenta a los reclamos de los vecinos, quiero ser un puente entre las necesidades de la gente y lo que se pueda solucionar desde la Junta Departamental.
Será un trabajo en equipo con los demás ediles de mi lista y la bancada. Estoy muy agradecida con los compañeros de la 609 y del Frente Amplio
que creyeron en mí. Tenemos un arduo camino a recorrer.
Cuando se supo el resultado de las elecciones y que podrías acceder a ser edila, ¿qué fue en lo primero que pensaste?
—Pensé que para Tacuarembó hay un antes y un después de esta elección. Si bien en el fondo imaginaba que podría llegar a lograrlo, pero en una sociedad tan conservadora como los es la tacuaremboense es un logro muy importante. Yo me fui de acá por la discriminación que viví. Estuve 20 años afuera y regresé a un Tacuarembó que demuestra que sí se puede, que hay mucho por hacer. Que llegue a la Junta Departamental una persona trans, es muy importante. Sí hay diferencias, tenemos muchos aspectos que nos dejan marginadas; no es mi caso, pero se de chicas trans que lo viven, siempre les cuesta acceder a un trabajo digno. Yo soy la representación de que todo se puede y que somos personas normales como cualquier otra, tenemos muchas cosas para darle a la gente.
Agradezco a todos su voto de confianza.
Mi familia está muy contenta, me han apoyado mucho al igual que mis amigos. Seguiremos desde el lugar que nos toque, en este caso la junta, luchando por mantener los logros obtenidos, como el matrimonio igualitario, la ley trans, logros en aspectos sanitarios.
¿En la campaña electoral, como ha sido el diálogo con la población?
—Ha sido muy bueno, hubo mucho diálogo. En el medio rural me recibieron muy bien, a veces no están acostumbrados a ver a una persona trans,
pero siempre me recibieron con respeto, me escucharon. Pienso como ha cambiado la gente su cabeza, queda mucho, pero este es un gran paso.