El 24 de octubre de 1831 un decreto presidencial del entonces primer mandatario Fructuoso Rivera dispuso la creación de una villa en la región, la cual debería estar ubicada en la 5ª Sección Judicial del departamento (por ese entonces, Paysandú).
La tarea de esta fundación le fue encomendada al sobrino del Presidente, el coronel Bernabé Rivera (1799-1832). Fue así que partió de Montevideo una caravana de carretas y familias hacia la ribera del río Tacuarembó – que en lengua guaraní significa «río de los cañaverales o tacuarales».
Luego de tres meses, llegó la larga caravana al lugar (el denominado Rincón de la Tía Ana, una vasta región delimitada por los arroyos Tacuarembó Chico, el Tranqueras y el Ataque) y, tras que el agrimensor realizara la mensura, deslinde y amanzanamiento del futuro poblado, el coronel Bernabé Rivera fundó la villa bajo el nombre de San Fructuoso un 21 de enero de 1832, por celebrarse en el día del santo homónimo en el calendario cristiano.2 independientemente de la coincidencia del nombre con el de quien era su tío y todavía presidente del país, quien por otra parte, ya conocía la zona, pues en 1818 había establecido su Cuartel General muy cerca de allí, en el paraje denominado Capón de la Yerba (estribaciones de la Cuchilla de Tres Cruces).
Algunos de los primeros pobladores de San Fructuoso fueron Ramón de Cáceres, José María Navajas, Pascual Pittaluga, Manuel Britos, Cornelio Cantera y Lorenzo Fernández. Luego del proceso fundacional, Bernabé Rivera solicitó el envío de un sacerdote y que la villa se organizara judicialmente, con jueces, policías, etc. para el futuro pueblo, que dependía administrativamente, de las autoridades de Paysandú.
Para el año 1837 San Fructuoso era una villa en crecimiento. Contaba con más de 500 habitantes, juez de paz, jefe militar, cura párroco, alcaldes y una Comisión de Obras Públicas. Por esta razón, el 16 de junio se promulgó la Ley n° 158, que creaba tres departamentos: Salto, Paysandú y Tacuarembó, éste con cabecera en San Fructuoso. Hacia 1843, la villa de San Fructuoso pudo contemplar el paso de las fuerzas de don Juan Manuel de Rosas, algunas de cuyas inscripciones quedaran documentadas en el archivo municipal y en el parroquial.
Pasó el tiempo y la comunidad continuó creciendo. El 17 de junio de 1912, la villa de San Fructuoso fue elevada de categoría y, conjuntamente con ello, cambió su nombre por la Ley 4.031, por lo cual pasó a llamarse “Tacuarembó”. Se dice que el nombre fue dado por la costumbre, ya que la gente se refería con ese nombre al poblado que se encontraba en las cercanías del río Tacuarembó.
Para festejar ésta fecha tan especial e histórica desde la Intendencia Departamental, con la Dirección de Educación y Cultura y la Fundación Carlos Gardel. Comenzando asi los festejos de la Semana Gardeliana.
La actividad se desarrolló en el espacio público próximo al Arroyo Sandú, frente a Plaza 16 de junio de 1837.
Lo más llamativo ha sido la fogata Gardeliana, la misma fue encendidad colaboración del Cuerpo de Bomberos de Tacuarembó
Participaron grupos musicales y de baile del departamento: Grupo AFRO TANGOÓ, danza, candombe y tango, interpretando por primera vez “La Cumparsita” a ritmo de candombe, acompañados por los bandoneones de Sandra y Petera González y el recitado de Winston “Chucho” Méndez
Escuelas de Baile “LA PROA” y “EL ALTILLO”
Comparsas: LA BANTÚ, LONJAS BOHEMIAS, LONJAS DEL SANDÚ