En el marco de la investigación llevada a cabo por personal de la Brigada Antidrogas , con colaboración de la Dirección de Investigaciones, se determina la existencia de una boca de venta de estupefacientes en una finca de la zona.
En el marco de las tareas de investigación referentes al caso, en primera instancia se observó que los dos ocupantes de una moto al percatarse de la
presencia policial tratan de eludir el control, arrojando dos envoltorios, se logró interceptar a uno de ellos en calle Benelli casi 18 de Julio, tratándose
de un hombre de iniciales M. A. M. G., mayor de edad, poseedor de antecedentes penales. Mientras que en calle 18 de julio esquina Figueroa se procede a
la detención del otro hombre, tratándose de un hombre de iniciales M. Á. E. A. mayor de edad, sin antecedentes penales.
Una vez ubicados los objetos que habían arrojado, se verificó que era un envoltorio de nylon que contenía en su interior una piedra de pasta base de
cocaína con un peso de 3,05 gramos, y un recipiente de plástico y en su interior 44 chasquis de pasta base de cocaína, 2 envoltorios de nylon con marihuana; además de dinero en efectivo.
Se realizó un allanamiento en la casa de los imputados, en la que se logró incautar dos plantas de marihuana florecidas, objetos varios, posiblemente productos de hurtos.-
Transcurridas las instancias judiciales correspondientes, en el día de la fecha el Juzgado Letrado de 1ra. Instancia de 5to. Turno de Tacuarembó condenó a Miguel Angel Esteves Antúnez como autor penalmente responsable de «un delito de amenazas en reiteración real con un delito de receptación y un
delito de tráfico ilícito de estupefacientes en la modalidad de venta o negociación de cualquier modo, a la pena de tres años y un mes de penitenciaría de cumplimiento efectivo».