Los niños y niñas que concurren al CAIF Los Molles, gestionado por Grupo Sembrar, tendrán próximamente su plaza, la cual podrá disfrutar toda esa comunidad barrial. Este logro es producto del trabajo de dos años en el cual han participado diferentes instituciones del medio departamental y nacional, así lo han expresado integrantes del equipo del CAIF.
Una de las Instituciones que participa es Plan Juntos, el referente psicólogo Carlos Machado expresó “este Plan se trata de una intervención socio habitacional, una política pública que como componente sociocomunitario están apoyando la realización de la plaza sociorecreativa para los niños y toda la comunidad en general. El apoyo es en base a todas las organizaciones e instituciones presentes en el territorio, se han gestionado recursos humanos y materiales con el compromiso también de la comunidad.
La maestra del CAIF Gabriela Fros señaló a nuestro diario que actualmente concurren a la institución 50 niños, 27 en educación inicial y 23 en experiencias oportunas.
La psicóloga María Noel Silva integrante del equipo técnico destaca el trabajo desarrollado durante dos años, “es un procesos que nos emociona, es precioso poder ver cómo se avanzó, en este lugar había un basural, para eliminar al mismo se contó con el apoyo de la intendencia desde el 2016, se trabaja a nivel de la comunidad desde el CAIF. Empezamos a soñar en este proyecto de una plaza para los niños, es una necesidad del CAIF. En este año se empezó a concretar con el Movimiento Pachacuti, el Plan Juntos, Plan Ncional de Cuidados, Pastoral Social, el Grupo Sembrar, la Intendencia nos ha proporcionado material y mano de obra. Aquí comienza a visibilizarse un trabajo de dos años, de caminar hacia esta realidad”.
Para construcción de la misma cuentan con el aporte de los integrantes de PACHACUTI.
El Pachacuti nació como un campamento de trabajo de fin de semana en el Hogar la Huella (hogar fundado por ex-Castores) hace ya más de 15 años. Luego se paso a ir a colaborar a otras partes del interior del país y se extendió el campamento a una semana entera, la primera de vacaciones de Julio. En estas vacaciones de julio están distribuidos en 30 lugares de nuestro país.
“Pachacutí” significa “mundo al revés” en Quechua. En este campamento buscamos “dar vuelta el mundo”, vivir a la manera de Cristo. Los pilares que hacen de Castores un movimiento ignaciano (servicio, fe y vida en grupo) son también las bases de esta actividad. «Podríamos definir los objetivos del Pachacutí en:
· Vivir una fuerte experiencia de servicio, en comunión con la gente del lugar y los compañeros. Encontrarse con Cristo a través del trabajo y de la oración grupal» señalaron integrantes del grupo que trabajan en la construcción de la plaza, los mismos son de Montevideo , Argetina, Paraguay, EEUU.