Frutas y hortalizas frescas, arroz y otros tipos de granos, pan y otros panificados, son los alimentos que se encuentran con mayor frecuencia entre los residuos de los uruguayos, quienes llegamos a arrojar entre 36 y 40 kilogramos de comida al año, advirtió la columnista de radio M24, Alejandra Girona.
Un tercio de los alimentos producidos en el mundo se tiran a la basura y Uruguay no es ajeno a esta situación, afirmó.
Esta situación tiene distintas connotaciones co-mo las económicas, porque los países reducen el producto bruto, los presupuestos familiares aumentan y se desperdician muchos alimentos: 1.700 gramos por hogar y persona, un desperdicio anual de 36 kilogramos de alimentos per cápita.
Pero también desde la perspectiva ambiental. Hay decisiones posibles para disminuir la pérdida de alimentos en la cadena productiva, como las políticas estatales para generar un plan que implique reducir pérdidas.
Esto tiene vínculos con decisiones de compra por encima de lo necesario en los hogares, por no saber qué hacer con los alimentos tras varios días en las heladeras, etc.
La gran paradoja está en que el consumo de frutas y verduras es bajo entre los uruguayos y, a su vez, son los alimentos más arrojados a la basura. Son 18 kilogramos de verduras frescas y 11 kilos de frutas frescas en los residuos al año por cada uruguayo.
Compras de más, mal refrigerado, falta de costumbre de realizar listados para la compra, cocción de alimentos en exceso, son algunos de los motivos por el cual se tiran estos alimentos. Hay que pensar en la perspectiva ambiental y social, tras el empleo de tierra, agua, nutrientes y energía para la producción de alimentos que tampoco llegan a quienes sufren la inseguridad alimentaria, acotó Alejandra Girona.