Periodistas de Uruguay han participado de una encuesta realizada por la empresa de comunicación corporativa Quatromanos, que refleja la situación en la cual se desarrolla la tarea profesional en este contexto de pandemia.
La Red de mujeres periodistas ha participado en esta instancia, cuyo resultado se presentó recientemente:
Desde la aparición el 13 de marzo pasado de los primeros casos de COVID19 en el país, los periodistas perciben que su volumen de trabajo aumentó y
que el distanciamiento físico ha afectado de algún modo la calidad de su tarea, al tiempo que ocho de cada diez teme que su estabilidad laboral esté en peligro
y seis de cada diez ha sentido el impacto económico de la crisis en su núcleo familiar.
Más de un centenar de periodistas de medios gráficos, digitales, televisión y radio de Montevideo y el interior del país respondieron la semana pasada a un
cuestionario que la empresa de comunicación corporativa Quatromanos les hizo llegar para profundizar en la mirada que los profesionales de la información tienen de la emergencia sanitaria y de sus efectos en su trabajo cotidiano, el temor a contagiarse por realizar su tarea, y el impacto económico que la pandemia tiene en ellos y en quienes les rodean. De acuerdo al sondeo -que fue respondido por 102 periodistas- desde la aparición de los primeros casos del virus en Uruguay, un 57,8% percibe que su volumen de trabajo aumentó «algo» o «significativamente». Por el contrario, un 20,6% sostiene que el mismo «bajó
algo» o «significativamente». Cuatro de cada diez (44,1%) dijeron estar trabajando entre ocho y diez horas tras el inicio de la emergencia sanitaria.
En tanto, un 20,6% aseguró que su jornada de trabajo suele ser de «más de diez horas» diarias.
En cuanto al teletrabajo, nueve de cada diez periodistas afirmaron estar realizando sus tareas «parcial» (47,1%) o «totalmente» desde su domicilio. Entre
ellos, la mayoría absoluta (54,5%) considera que ello no ha afectado la calidad de su trabajo periodístico.
Para el 64,7% de los periodistas el teletrabajo «es una práctica que algunas empresas periodísticas comenzarán a fomentar» una vez que se supere la pandemia, y un 13,7% que se trata de «una tendencia que se impondrá y se volverá predominante en un futuro cercano».
Solo un 21,7% piensa que se trata de algo temporal, que desaparecerá con el virus.
La distancia y el contagioEntre los periodistas que han continuado realizando tareas con normalidad, un 38,2% admite temor al contagio del virus.
Por lo demás, casi ocho de cada diez reconoce que trabajar y mantener a la vez el distanciamiento físico recomendado afecta «algo» (49%) o incluso «mucho» (27,5%) el ejercicio de su tarea periodística.
La información y las herramientas Respecto del acceso a herramientas de capacitación para profundizar en la temática de la pandemia, un 28,6% dijeron haber tenido esas instancias. En otro orden, el 67,6% de los periodistas que respondieron el cuestionario de Quatromanos dijeron haber percibido un incremento de las denominadas «fake news» durante la pandemia. El 46,1% sostuvo que las «fake news» han afectado de algún modo su trabajo periodístico.
Respecto del interés de los uruguayos por mantenerse informados y actualizados de las noticias durante la emergencia sanitaria, el 82,4% sostuvo que ha aumentado. Frente a esa mayor avidez del público, más de ocho de cada diez periodistas consideran que la cobertura que los medios están realizando en Uruguay es «buena» (53,9%) o «muy buena» (27,5%).
La situación personal Al ser consultados acerca de su futuro, el 86,3% del total de los periodistas que respondieron a la consulta dijeron sentir «temor» por una posible afectación de su estabilidad laboral producto de los efectos económicos de la pandemia. De hecho, un 14,1% dijo haber sido enviados al seguro de paro desde el inicio de la emergencia sanitaria en Uruguay.
En cuanto a los ingresos de su núcleo familiar, un 42,2% admitió haber tenido «una reducción leve» y un 26,5% una disminución «importante» de recursos.
Poco más de uno de cada tres señaló no haber sentido hasta el momento el efecto de la crisis en la economía de su familia».