Es importante tener en cuenta algunos consejos para pasar un verano saludable. Siga estas recomendaciones de la Organización Panamericana de la Salud para poder disfrutarlo con salud, con el especial cuidado ante el sol, consumir agua segura y alimentos en buen estado.
Las altas temperaturas que tenemos en los días de verano, que pueden ser llamadas olas de calor y la exposición
prolongada al sol pueden provocar golpes de calor y hasta quemaduras en la piel.
Para evitar un golpe de calor:
– Hidrátese, beba agua con mayor frecuencia (aún cuando no se sienta sed). Procure siempre consumir agua segura (potable).
– Evite bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes.
– Evite las comidas pesadas.
– No realice actividad física intensa.
Consumo de agua
– Procure el uso responsable/sustentable del agua en el barrio, hogar y espacios de trabajo.
– No beba agua sin antes comprobar su potabilidad y mantenga el agua segura correctamente envasada (en botellas o bidones limpios y cerrados) en la heladera, en lugares frescos y alejada de fuentes de calor.
– En el caso de agua dudosamente potable, asegúrese de acceder a agua segura y/o recurrir a formas seguras de
potabilización.
– Uno de los tratamientos para que el agua sea segura, es hervirla hasta que salgan burbujas durante 3 minutos, y esperar a que se enfríe para consumirla.
Alimentos
– Mantenga en la heladera aquellos alimentos frescos y que puedan echarse a perder debido al calor.
– Verifique la temperatura y controle el buen funcionamiento de la heladera.
– Deseche los alimentos perecederos (incluidos la carne, el pollo, el pescado, los huevos y las sobras) que hayan estado por 2 horas o más fuera del frío de la heladera.
– Mantenga los alimentos que pueden estar fuera de la heladera, en lugares limpios y frescos y al resguardo de
fuentes de calor.
– Deseche los alimentos que tengan olor, color o textura anormales.
– Descarte todos los alimentos enlatados cuyos envases estén abiertos, dañados o inflados.
Lugar de trabajo
– Controle que funcione la refrigeración y/o ventilación del ambiente y asegúrese de que el establecimiento esté
al día con las medidas preventivas generales, vinculadas con los primeros auxilios y acceso a la atención médica
de emergencia.
– Lleve consigo suficiente cantidad de agua (segura) en botellas limpias, aptas para la reserva de la misma.
– Evite ambientes de trabajo ubicados en el exterior o que tengan exposición directa al sol (sin refrigeración), en
particular en los horarios de mayor temperatura.