Los cinco años más cálidos jamás registrados fueron los que integran el último lustro, cuando el mercurio subió entre 1,1 y 1,2 ºC, respecto a la era preindustrial
El año 2019 fue el segundo más cálido jamás registrado en el mundo y culminó una década récord en temperaturas, anunció este miércoles el servicio europeo Copernicus, en un contexto de multiplicación de fenómenos climáticos extremos, como los incendios en Australia.
Los datos publicados revelan que 2019 se situó sólo 0,04 ºC por detrás del año récord de 2016, cuando las temperaturas se vieron afectadas por un episodio especialmente intenso del fenómeno meteorológico El Niño.
Según la NASA, El Niño provocó ese año un aumento de la temperatura mundial de 0,2 ºC. El periodo de 2010- 2019 fue también la década más cálida.
Las temperaturas en 2019 fueron 0,6 ºC superiores al promedio del periodo 1981-2010. «Es innegable que se trata de señales alarmantes», subrayó Jean-Noël Thépaut, director del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Medio Plazo, del que depende este servicio especializado en cambio climático. Debido a las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad humana, el planeta ya registró un alza de al menos 1 ºC respecto a la era preindustrial, con efectos devastadores.
Conforme a las previsiones de los meteorólogos, 2019 registró numerosos fenómenos extremos.
En Australia, los incendios en curso hallaron un terreno idóneo para propagarse debido a la sequía y a unas temperaturas excepcionales. Unos 80.000 km2 se esfumaron con las llamas, una superficie equivalente a la de la isla de Irlanda.
Durante el verano boreal, Europa vivió por su parte periodos caniculares sin precedentes. Según Copernicus, 2019 fue el año más cálido jamás registrado en este continente, justo por delante de 2014, 2015 y 2018.
Las temperaturas también fueron especialmente elevadas en Alaska y en vastas regiones del Ártico. Copernicus confirmó por otro lado que las concentraciones de CO2 en la atmósfera continuaron aumentando el año pasado.
Según el balance anual del Global Carbon Project publicado en diciembre, estas emisiones progresaron 0,6% en 2019. Sin embargo, la ONU señaló recientemente que las emisiones de gases de efecto invernadero deberían reducirse en 7,6% anual hasta 2030, para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ºC, el objetivo ideal que se marcó la comunidad internacional en el Acuerdo de París de 2015.
Sin embargo, al ritmo actual, la temperatura mundial podría aumentar hasta 4 o 5 ºC a finales de siglo respecto a la era preindustrial y comprometer el futuro de las jóvenes generaciones. E incluso si los países respetaran sus promesas actuales de reducción de emisiones, el aumento podría superar los 3 ºC. Los científicos demostraron que cada medio grado adicional aumenta la intensidad y/o la frecuencia de fenómenos como canículas, tormentas, sequías e inundaciones.