La presidenta de la Asociación de Free Shops de Rivera señaló que no ha habido «ningún brote que comenzara en un comercio de Rivera»
La situación de los free shops se ha visto muy afectada por la pandemia luego de que se determinara su cierre desde el 22 de marzo por
las medidas sanitarias.
«Es una situación que nos tiene muy preocupados», dijo la presidenta de la Asociación de Free Shops de Rivera y propietaria, María Lina Varela, en entrevista en Justos y Pecadores.
«Somos 53 empresas habilitadas, de un total de 102 del país. Somos el 70% del movimiento de free shops que ocupa a
unas 1000 personas de forma directa», señaló Varela.
Según explicó, la situación se agrava debido a que estas empresas deben mantenerse cerradas pero pagando gastos.
«Lo que nos preocupa son los costos nuestros, nacionales», dijo.
«Estamos a la espera de que se puedan abrir las fronteras. Los uruguayos, por un tema de costos, consumen diariamente del lado brasileño, entonces no sé si no es más la movilidad hacia ahí», advirtió.
Todavía no hay una fecha de reapertura de estos comerciones pero se estima que podría ser el 16 de mayo, fecha hasta la cual se extienden las
medidas del gobierno.
Por otra parte, aclaró que desde que empezó la pandemia «no hubo ningún brote que comenzara en un comercio de Rivera».
Las pérdidas laborales es otro tema que afecta directamente el cierre de los free shops. «Ha habido pérdidas de fuentes laborales pero nos hemos
acogido a las medidas de los seguros flexibles, pero a partir del 22 de marzo pasaron todos a seguro total», explicó Varela.
Desde la Asociación de Free Shops se espera que se efectivicen las medidas de apoyo, «pero la solución para nosotros es poder comercializar
nuestros productos».
Los comerciantes han planteado soluciones alternativas al tema y confían en el proyecto de ley presentado por los diputados por Rivera Marne Osorio (Partido Colorado) y Nazmi Camargo (Cabildo Abierto) que comienza a ser tratado en el Parlamento.
El mismo apunta a que, salvo alcohol y cigarrillos, todos los productos que se venden en un free shop puedan ser adquiridos por los uruguayos en
un régimen similar al de las franquicias del exterior, que habilita hasta tres compras al año de 200 dólares cada una.