¿Agua clarita? ¿Abundante? Sl alguien me acusa de reiterativo, tiene toda la razón. Tal vez los años o vaya a saber qué, pero como ya lo había dicho es
lindo vivir con tiempo para distraerse y poder pasear, también encarar postergadas manualidades y otras lindas cosas que las TICs nos permiten.
Se transforma esto en algo sumamente placentero. También es posible entonar bellas canciones en nuestros paseos y de repente… ¡! Zas ¡! Los registros en la memoria nos llevan hacia otros sitios, retornando a nuestra mente algunas y reiteradas inquietudes.
Otra vez el abastecimiento de agua potable a la ciudad capital de Montevideo vuelve a ser preocupación y estar en las noticias y para mejor con restricciones presupuestales. Precisamente tarareando esa vieja canción escolar paseando a mi perro, escucho por el audífono de mi radio portátil los
problemas que con el agua potable se están presentando en el área metropolitana, donde casi 2.000.000 de habitantes reciben el suministro proveniente casi en exclusividad de una única fuente: el Río Santa Lucía.
El Poder Ejecutivo del anterior gobierno había encomendado un detallado estudio e la cuenca y el estado de las aguas de este importante río.
Es coincidente este hecho con la Declaración de Acceso al Agua como Derecho Humano Fundamental en Uruguay que cumplió el 1 de noviembre, 23
años de la Reforma Constitucional en la cual los uruguayos eligieron soberanamente cambiar la forma de gestionar las aguas del país y reivindicaron el acceso al agua potable y al saneamiento como un Derecho Humano Fundamental.
Esto se complementa posteriormente con una Ley de Riego. Esta reforma estableció las bases para la Política Nacional de Aguas que se aplica actualmente y que ha experimentado grandes transformaciones.
También los problemas en Maldonado y Punta del Este por la toma de agua en Laguna del Sauce, que por ser laguna con emprendimientos turísticos y
asentamientos en sus márgenes comienza a presentar serios problemas. No quiero pensar que sucedería si se hubiera mantenido la vieja y ya anulada toma
en la pequeña Laguna del Diario.
No hay duda que el incremento poblacional y servicios en este centro turístico, tal vez el más sofisticado de la región, necesita una permanente atención. El
turismo es de vital importancia para nuestra economía y no menos importante para la población permanente de ese centro urbano y turístico.
El recurso hídrico es más que suficiente para Maldonado, Punta del Este y localidades próximas bien con el sistema actual (Laguna del Sauce, Laguna de
los Cisnes) o por futuras operaciones de desalinización que son hoy más económicas que hace algunos años y menos complejas. Tal vez sea esta una
posibilidad a tener en cuenta. Seguramente estos temas ya están siendo analizados por nuestros jóvenes en los centros de estudios tecnológicos del Uruguay.
Respecto al Área Metropolitana recuerdo que en el período 1995-2000 la presidenta de la Comisión de Área Metropolitana de la Junta Departamental de
Montevideo, Edil Alicia Topolansky, dinámica, inquieta y dedicada mujer, reiteradamente daba cuenta de informes que llegaban a la Comisión sobre advertencias de productores y pobladores de la zona en relación a indicios de contaminación en las aguas del río Santa Lucía y su cuenca.
Por tal motivo nos interesamos en el tema y entre otros datos nos enteramos que años antes, expertos japoneses, actuando en nuestro país, advertían sobre el
inconveniente que una ciudad capital y su área metropolitana, tuviera el abastecimiento de agua potable proveniente de una única fuente. Esto presentaba un
riesgo, ya que en caso de problemas en esa fuente, no se disponía de toma alternativa.
Algo parecido a lo que sucedió en Maldonado y Punta del Este. Pasar de la Laguna del Diario a la Laguna del Sauce y otros reservorios.
La Misión Técnica Japonesa hizo una recomendación. Realizar una toma alternativa en el Río de La Plata, donde la salinidad fuera menor, evitando
así la desalinización. El punto indicado fue Arazatí. El caudal y características del Río de La Plata daban todas las garantías para una toma alternativa segura y confiable.
Esta obra u otra similar no se han realizado aún.
Tiempo después, período de gobierno 2005-2010, estando en el MVOTMA, concurrí al punto indicado como toma alternativa y me pareció una buena propuesta de la Misión Japonesa, pero en ese período, OSE y el Ministerio debieron cumplir con la reforma constitucional que impedía a privados producir y suministrar agua potable, lo cual determinó en ese período una difícil y larga negociación con pequeñas empresas, comisiones vecinales y empresas extranjeras que producían y distribuían el recurso hídrico fundamentalmente en Ciudad de la Costa, Costa de Oro y Maldonado-Punta del Este.
La mayoría de estos emprendimientos tomaban el agua subterránea de napas profundas en las cuales la contaminación que pueden sufrir los cursos superficiales es menor o incluso inexistente.
Cumplido este cometido y siendo el Estado el único responsable hoy del manejo del recurso hídrico, me parece que ha llegado la hora de proponer y realizar una toma alternativa como la propuesta, que garantice para la capital y el área metropolitana las mejores condiciones de suministro . No perdamos una de
las características más singulares que disponemos y no valoramos en su totalidad:
TOMAR AGUA DIRECTAMENTE DEL GRIFO. Eso pasa en muy pocos países.
En el pasado fueron pozos los que abastecieron al Montevideo colonial donde los aguateros distribuían en la ciudad lo recolectado en tales pozos, hasta que la
población y la demanda aumentaron considerablemente. Y a en el Uruguay republicano, en 1867, el gobierno licitó el suministro de agua corriente por
cañería a la población de Montevideo, debido al «abultado costo en bombas y mantenimiento».
El servicio de aguas corrientes se inauguró el 18 de julio de 1871.
El agua se extraía del Río Santa Lucía. La planta de tratamiento y las bombas fueron asentadas en la población que tomó el nombre de Aguas Corrientes.
Era mucho la población de Montevideo y el área metropolitana que la actual. Los agro tóxicos agrícolas eran casi inexistentes.
El servicio pasó a manos del estado en 1950 cuando fue creada la Administración de las Obras Sanitarias del Estado. El caudal de agua se aseguró mediante la represa y embalse de Paso Severino (Florida). En 1997 se incorporó la quinta línea de bombeo.
A partir del año 2000 el sistema Montevideo suministra agua corriente a Montevideo, Las Piedras, Progreso, Pando y Ciudad de la Costa.
El Río Santa Lucía sigue siendo la fuente de abastecimiento y tarareando me pregunto «… ¿Agua clarita traes…? »y si no es así, me parece que es hora
de encarar una segunda toma segura y confiable. Me gustael Río de La Plata.
Siempre que abastezca directamente y no que se envíe agua del mismo a los embalses existentes de la cuenca del Santa Lucía donde la contaminación es creciente.
Nuestro país ha crecido en producción y exportación de bienes y servicios incrementando su P.B.I. en los últimos quince años lo que anteriormente demoraba
cincuenta años. Ello implica que este incremento productivo pueda afectar las aguas superficiales de ríos interiores y lagunas. Los caudales de estos cursos de
agua ya no son capaces de diluir o minimizar eficientemente los aportes contaminantes que provienen de estas actividades, en muchos casos realizadas en
la proximidad de sus márgenes. Por momentos pareciera que carecemos de conciencia real como pueblo, de lo que implica poseer tan elevado índice de
potabilidad en el territorio nacional (90% de la población con agua potable distribuida y más de un 70% de saneamiento) .De hecho, bastaría traer al presente aquella terrible epidemia de cólera que comenzando en Perú, invadió y afectó al continente entero, en la década de los 90; quedando nosotros bajo salvaguarda de la misma. Diría que no es algo menor… La enfermedad de «las manos sucias» no afectó a nuestro país. Uruguay dispone de numerosos ríos, arroyos y lagunas, así como de excelentes acuíferos como el Raigón, el Guaraní y otros menores. También del estuario del Plata y la Costa Atlántica. Posibilidades para disponer del recurso hídrico con destino al consumo humano con seguridad y abundancia no nos falta. También desalinizar aguas
oceánicas es vez más posible y económico.
Ha llegado la hora de innovar y de invertir en algo tan fundamental. Es lo que ha caracterizado al Gobierno desde 2005 y debería continuar aún con otro
partido político en el gobierno. Confío en las autoridades y técnicos de nuestro país que tienen la responsabilidad de suministrarnos un recurso tan fundamental para la vida como es el agua potable.
La pandemia del CV19 ha mostrado que un equipo técnico así como los institutos de investigación universitarios y no universitarios pueden y deben asesorar a los gobiernos. No me dejo llevar por la paranoia y por lo tanto no me propongo abrir mi propio pozo. Sigue siendo hermoso llegar a casa, abrir el grifo, llenar el vaso y canturrear… «agua clarita traes…» no me defrauden.