“Acabamos de pedirle al (Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca) MGAP que haga las gestiones con (el Ministerio de) Economía para postergar por 30 días el pago de BPS rural en las zonas afectadas por la sequía”, informó el senador Sebastián Da Silva a El Observador.
El cuatrimestre rural es el impuesto que deben pagar los productores rurales por aporte patronal al Banco de Previsión Social (BPS), se paga por hectárea y este año la fecha de vencimiento es el próximo 20 de enero.
El senador explicó que le solicitó al ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Carlos María Uriarte, que se postergue la fecha del pago porque “estamos
preocupados por la situación de sequía que hay, sobre todo en el este y el noreste del país, porque, si bien llovió, no llueve pasto”.
Se espera que la respuesta del ministerio esté en las próximas horas.
Si se aprueba esta petición, la postergación del pago sería únicamente para los productores afectados por la emergencia agropecuaria.
Da Silva comentó que si la solicitud se concreta “eso implicaría que hasta que el tiempo se normalice, los productores puedan aguantar un poco las haciendas para no desprenderse de forma barata de ellas, para hacer frente a las obligaciones. Y que los que hoy, por tener ganados en estado muy complicado, no entren en atrasos que generan mora, intereses y pagos por multas por atraso, que hace que sea un camino sin retorno”.
Según dijo, 30 días de prórroga y la concreción de los pronósticos meteorológicos que anuncian precipitaciones para el fin de semana, podrían permitir
que los productores tuvieran alimento para el ganado. “La gente no tiene comida y esto es un puente hasta que vengan las lluvias y a fin de febrero el panorama pueda ser otro”, explicó.
Sobre las precipitaciones de los últimos días en diferentes partes del país, Da Silva dijo que “han venido en mangas”, y que algunas partes del territorio nacional siguen necesitando agua. “En la zona de cría del este la situación sigue siendo desesperante, con algo de agua en sus perfiles, pero de todas formas hay que esperar. La primavera se perdió y nosotros debemos encontrar mecanismos para ganarle al tiempo y mientras tanto no generar un perjuicio adicional al productor”.