En un remate que culminó sobre la hora 20 de miércoles, en el local de ferias ganaderas Zapará el escritorio Ernesto Esteves & Cía, despachó toda la oferta de lanares, vacunos y equinos.
Con la conducción en las ventas de Fernando Pagalday y Licho Rovira, se vendieron más de 1.100 lanares, que pasaron por la pista en lotes no muy grandes ante la ausencia de los compradores de grandes volúmenes. Igualmente operaron alrededor de 30 compradores, que por capones negros pagaron de U$S 90 a 100; por capones y ovejas esquiladas de 40 a 85, las ovejas para el campo de 41 a 48; borregos y borregas diente de leche de 40 a 69; borregas esquiladas de 50 a 56; corderos mamones de 30 a 51.
En vacunos, la comercialización fue ágil, con mucha participación de operadores que seguían la trasmisión por internet Se vendió una lechera en 1.000 dólares. Las vacas gordas de 870 a 960; las vacas de invernada de 545 a 752; los novillos de 450 a 705; las vaquillonas de 1 a 2 años de 322 a 465; las vaqui-llonas de 2 a 3 de 545 a 600. Las piezas de cría de 417 a 485; los terneros de 312 a 490; terneras 322 a 352. Por los toros de industria se pagó de 815 a 990.
En los lanares hubo mucha participación de compradores de la región, mientras que en vacunos operaron varios interesados por teléfono, incluso hubo una compra desde EE.UU. de un productor del litoral del país.
Se vendió una yegua en 590, potrillo en 305, y por tres burros se pagó U$S 110 cada uno.
El promedio general de los ovinos fue de U$S 61,09; y el de los vacunos fue de U$S 581,50.