Las rutas 26 y 31 estarán unidas por un bypass, con el objetivo desviar por allí el tránsito pesado que actualmente utiliza avenidas de la planta
urbana. Tendrá una extensión de seis kilómetros y la obra quedará terminada el próximo año.
Ayer a la mañana se firmó el contrato de obra entre la Intendencia de Tacuarembó y la empresa Ramón Álvarez C. Alvarez, adjudicataria tras la licitación correspondiente, y que se hará cargo de la construcción de este bypass para tránsito pesado al oeste de la ciudad capital departamental.
El intendente José Omar Ménendez, en representación de la comuna, y el ingeniero civil Marcelo Faguaga de la empresa adjudicataria,
rubricaron el contrato que prevé la duración de la obra en 10 meses. Según se indicó en la comunicación con la prensa tras la firma del convenio, el pavimento será de imprimación asfáltica sobre una base de hormigón, y el costo de la obra ascienda a los $92.526.874.
El mismo viene a solucionar un conflicto entre el transporte de carga y el tránsito local, principalmente en la ruta 31, donde debido a falta de infraestructura, el transporte de carga ingresa a la zona urbana de la ciudad por la avenida Oliver, una vía de tránsito muy utilizada por el tránsito urbano.
El proyecto consiste en 6 kilómetros de vía que unen la Ruta Nº 31 (km 214,5) con la Ruta Nº 26 (km 226), suficientemente al oeste de la ciudad como para que el Plan de Ordenamiento Territorial Las rutas 26 y 31 estarán unidas por un bypass, con el objetivo desviar por allí el tránsito pesado que actualmente utiliza avenidas de la planta urbana. Tendrá una extensión de seis kilómetros y la obra quedará terminada el próximo año.
asegure que se mantendrá fuera de la trama urbana. Ya está culminada la construcción de una rotonda en la ruta 31, uno de los extremos de este bypass, y resta el acondicionamiento del otro extremo, con una rotonda en la ruta 26 en el cruce con el camino Soldado Eusebio Godoy, donde está el matadero
Luchasol, en la zona de La Pedrera.