“Los seres humanos tenemos que alimentar grandes sueños para tener grandes logros “, pobre de la persona que no tiene un sueño”.
“La felicidad nunca es plena, cambiaria todo lo material que tengo, por tener a mi hijo. Hay afectos que son impagables e imborrables”.
Wilson Ezquerra Martinotti político, empresario, dirigente de fútbol, fundador del Tacuarembó Fútbol Club, cómo se posiciona en estas elecciones internas de los partidos, sus aspiraciones políticas para el próximo período, el que quiere y sueña…
En esta entrevista con nuestro diario conocemos al hombre detrás del empresario, del político.
“Nacimos y nos criamos en la zona de Avenida Oliver, a una cuadra de Avenida Oribe, ahí vivimos gran parte de nuestra infancia. En la esquina de Piedra y Oliver mis padres tenían un pequeño comercio. Uno se va formando y de laguna manera uno se va siendo parte de ese sueño de mis padres, nos formamos en ese ambiente, con un padre y una madre de mucho trabajo, 6 hermanos, una familia de trabajo es lo que fuimos percibiendo “.
Cursó sus primeros tres años en el Colegio Jesús Sacramentado, cuarto año en la Escuela número 2. En 1965 se mudó la familia a Catalina 190 casi 25 de Mayo, donde aún vive su madre. Su padre falleció hace 25 años. Ezquerra desataca que su familia siempre ha sido muy unida. Sintió mucho la pérdida de su padre lo define ”más que padre un amigo”
– ¿La política era un tema que se tratara en la familia?
– Con papá si, de él nos viene el apego a la política. A los 13 años comencé a militar por Carlos Julio, mi padre era del Movimiento Nacional de Rocha, nos involucramos, íbamos al Comité. Posteriormente abrimos el Comité del Movimiento Estudiantil Nacionalista, éramos todos jóvenes. Ahí fue la fundación del Movimiento Nacional de Rocha en Tacuarembó, mi padre fue el fundador. Las diferencias que habían en casa eran que mi madre me mandaba a estudiar porque pensaba que la política no me iba a dar nada y mi padre apoyaba que fuera al comité, que estuviera en la política
– ¿Su etapa como docente, cómo surge, cómo la vivió?
– Terminé el preparatorio y me di cuenta que lo mío era lo empresarial, pero quería tener un oficio porque las empresas como todo en la vida puede ir mal. Quise tener un oficio, finalizado preparatorio de ciencias económicas empecé mecánica y electricidad en UTU. Me gustó la mecánica y terminado el primer ciclo, me fui a hacer el segundo y tercer ciclo en Montevideo. De ahí consigo una beca en UTE, trabajé en Central Batlle como mecánico tornero durante 3 años, ahí se da la posibilidad de ir a la Represa de Palmar como sobrestante de mecánico, ahí junte para poner la zapatería. En ese lugar ganaba 5 veces más que en UTE.
Resuelvo casarme y me vengo a Tacuarembó, ahí ingreso como docente en UTU, de mecánica y de electricidad, con la formación que había adquirido. Al año que estaba radicado en Tacuarembó decidí abrir mi empresa. Yo sabía que un día iba a formar mi empresa. Tenía una Suzuki 450 y una Honda 125, las vendí y con lo qué ahorré de mi trabajo las vendí e inicié el comercio.
– ¿Por qué eligió el rubro zapatería?
– Fue difícil elegir, no sabía si abrir una casa de ropa para hombres, ropa para bebés o una zapatería, eran las carencias que veía en el Tacuarembó de esa época. Estaban zapatería Parisien, zapatería Central, las tiendas en aquel momento eran de armos generales. Pero nos decidimos por el rubro zapatería
– ¿Cuando comienza a trabajar fuertemente en la política, soñó con ser Intendente de Tacuarembó?
– Nunca. Cuando viene la elección de Edil Departamental que fue primero, Eber fue candidato a Diputado en esa oportunidad, sacamos una lista la 504, que tenía a Deber como Diputado y Sergio Chiesa como candidato a Intendente, con 4 ediles que fueron: Zita Pereira, Yakes , Bertiz Vazquez y yo. Siempre recuerdo que mi padre quería que estuviera en la política, el fue edil previamente a la dictadura. El fallece un mes antes de esa elección, por lo cual no pudo ver a un hijo involucrado así en la política.
Fui presidente de la Junta, fui presidente del Congreso latinoamericano de Ediles, para mí ya era lo máximo. Cuando Eber gana la Intendencia me pide que lo acompañe como secretario general, lo acompañamos dos años y medio, ahí uno va generando una experiencia, viendo lo que es la tarea ejecutiva. Tuve posibilidades de ser Diputado tres veces y nunca lo quise ser, yo me considero un hombre ejecutivo en la acción, cumplir sueños que uno alimenta permanentemente. Siempre digo “Los seres humanos tenemos que alimentar grandes sueños para tener grandes logros “, pobre de la persona que no tiene un sueño. Por donde ande, siempre tengo la visión de tras polar las cosas buenas para nuestro departamento, qué cosas uno desearía…
“A Dios gracias en lo económico me fue muy bien, lo que no me fue muy bien ha sido en la vida personal, la perdida de mi hijo nos marcó fuertemente. Lo ven a uno y pensarán que soy un tipo feliz. La felicidad nunca es plena, cambiaria todo lo material que tengo, por tener a mi hijo. Hay afectos que son impagables e imborrables. Es difícil la vida, tiene sus enfoques, a veces no le damos el valor de lo que realmente tenemos y lo importante de lo que tenemos. El afecto de los hijos, los padres, los hermanos, el amor de la familia, esas cosas a veces no le damos la dimensión que se merecen, nos fijamos en lo material sin tener en cuenta lo espiritual.”
– ¿Como vivió su etapa de intendente?
– Una etapa en la cual aprendí mucho y no me arrepiento de nada. Amo el departamento y la sociedad en que vivo, di lo mejor de mí. Mis mejores amigos y mi familia están en Tacuarembó, mi sueño mayor es que mis hijos, nietos, mis sobrinos tengan lo que yo no tuve, como poder estudiar y tener una ciudad que sea el orgullo de cada uno. Creo que uno tiene que pensar no en el futuro inmediato sino ver un departamento del futuro. Se me criticó por la obra de los puentes, la cual había que proyectarla a muchos años. El tema de la residencia universitaria es un sueño a 30 años, sino construimos una infraestructura para que la Universidad pueda radicarse con más cursos para que puedan venir estudiantes del interior del departamento y de otros a radicarse en nuestra ciudad. Eso es transmitir valores de personas que quieren emprender y que quieren profesor.
En la elección interna de los partidos políticos 2019 Wilson Ezquerra apoya a Jorge Larrañaga, Lista 2004
– ¿Cuáles son las aspiraciones de Wilson Ezquerra en el ámbito político?
– En esta interna apoyando a Larrañaga y respaldando la reelección de Eber Da Rosa, no tenemos una aspiración política. Por qué apoyar a Larrañaga porque es un hombre trabajador , conocedor de la realidad del interior, de las dificultades que se viven , de la educación , de lo que representa la necesidad de la descentralización. Que tengamos las mismas oportunidades todos los uruguayos. Creo que hay una sensibilidad especial de quien vive en el interior, de un gobernante del interior a gobernar el país. Desde afuera hacia adentro. Estaría bueno que los de afuera gobernáramos con una visión diferente. El interior es lo que más aporta para el desarrollo del país, en valores de personas, en la producción y el trabajo. El proyecto de Larrañaga sobre la seguridad es sumamente importante y logró 410.000 firmas eso manifiesta claramente la necesidad de un cambio en la seguridad pública.
Con Larrañaga vamos a trabajar por lo que sentimos, por el que creemos es el mejor candidato, cada uno piensa como piensa y respeto a los demás partidos. Tengo grandes amigos de otros partidos , grandes amigos dentro de mi partido, que pensamos diferente y nos tenemos mucho respeto. No me gusta tener enfrentamientos, no vale la pena perder una amistad ni por futbol, ni por política , ni por religión, ni por nada. Uno puede expresar su forma de pensar, sin tener que agraviar, con el mayor de los respetos, con tolerancia”.
– ¿Qué palabras lo motivan?
– Sueños, amor, trabajo, recuerdos. Son cosas que están en el día a día
– Las palabras que lo decepcionan?
– El egoísmo, la falsedad, el engaño.
– ¿Qué cosas quiere que la gente recuerde de usted, como el docente que fue, el empresario, el político, el vecino de Tacuarembó?
– Que recuerde a un hombre cálido, afectuoso, respetuoso. Que me recuerden como una persona de trabajo, de esfuerzo, solidario. Como un tipo que trata de mejorar la calidad de vida de mis semejantes, de las personas que siento y quiero que son en definitiva la sociedad en la que vivo.