Termina el primer semestre del año en la UDELAR, y sobre cómo se desarrolla el período de exámenes y revisiones se refiere Diego Pereira, de la unidad de comunicación de la sede universitaria de Tacuarembó
En el marco de la pandemia provocada por el Covid-19, la Universidad de la República tomó inmediatamente una serie de medidas. Se suspenden las clases presenciales en todo el país, hasta que las condiciones sanitarias permitan su implementación en condiciones de seguridad. Se utilizan todos los medios
disponibles para facilitar el contacto de los docentes con sus estudiantes, con la adecuación de la mayor parte de los cursos a modalidades a distancia. También se facilitan computadoras a estudiantes que las necesiten. Desde marzo pasado los edificios universitarios permanecen con acceso restringido, sin perjuicio
de que los servicios puedan definir e instrumentar progresiva y gradualmente actividades laborales, contemplando la seguridad sanitaria. Las actividades de gobierno universitario y gestión en todos los servicios, se efectúan mayormente por medio del teletrabajo y las plataformas digitales adecuadas.
El Avisador dialogó con Diego Pereira, docente, integrante de la Unidad de Comunicación de la Sede Udelar Tacuarembó, con el fin de conocer cómo se desarrolla la etapa de exámenes y la forma en que los funcionarios llevan adelante su tarea en tiempos de COVID.
«En Julio y agosto se termina el primer semestre, es período de revisiones y exámenes. Se trata de que las revisiones sean las mínimas. Hay asignaturas de varias carreras que requieren actividades presenciales, por lo cual se activa el protocolo», señaló Pereira. En tal sentido, continuó, «seguimos las líneas sanitarias nacionales; los estudiantes no pueden estar hasta 15 minutos antes que se habilite el ingreso al edificios. Todos quienes vayan a ingresar deben tener tapaboca, hay dispuesto alcohol en gel, se les toma la temperatura, y si el estudiante tiene más de 37.5 grados, no puede ingresar a hacer el examen y se le pide un certificado para que no pierda la escolaridad».
También solicitan y recomiendan no compartir mate, bebidas, alimentos, y productos personales. «Los estudiantes van directamente al salón donde les toman la revisión y luego se les pide que abandonen de forma inmediata el edificio evitando aglomeraciones», agregó.
En cuando a las tareas que cumple el personal del centro universitario, apuntó Pereira que lentamente se está volviendo al régimen presencial.
«Se han habilitado algunas actividades, como por ejemplo la biblioteca, lunes, miércoles y viernes de 10 a 14 horas. A los funcionarios se nos hace el control de temperatura, y todas las demás medidas con énfasis en el distanciamiento social de 2 metros en las oficinas. Si la misma es muy chica, se van rotando los turnos y se va alternando la presencia de cada uno».
Consultado si hay expectativas de regresar pronto a las clases presenciales, Pereira dijo que «en este periodo será importante lo que se evalúe en términos de lo que son las revisiones y cómo funcionará, también teniendo en cuenta la emergencia sanitaria. En Tacuarembó, por suerte, tenemos una buena capacidad
en los salones de clases, son amplios, están en un lugar con aire libre. Por ahora lo que está definido es continuar en este régimen. Este año seguiremos de forma semi presencial, la virtualidad va a continuar también hasta que pase la pandemia.
Puede ser que vuelvan algunas asignaturas que sí o sí necesiten la presencialidad