Saulo Diaz – (PS/FA)
Latinoamérica viene padeciendo importantes cambios a nivel político, social y económico, que sin lugar a dudas de una u otra forma tensionan las relaciones entre oposición y gobierno en los países que sufren los famosos avances de los sectores de la derecha, con el fin de “ganar en la liga lo que no pudieron en la cancha”.
En este sentido, frente a el agravamiento de la crisis política en la República Bolivariana de Venezuela, sin lugar a dudas desde hace un tiempo a esta parte el Frente Amplio ha llamado, a la necesidad de la búsqueda de una salida política negociada entre gobierno y oposición, convencidos en evitar enfrentamientos que deriven en situaciones que pueden traer trágicas consecuencias al pueblo venezolano, y afectar la paz en el continente.
En esta línea, tomo como marco de pensamiento la declaración de nuestra Mesa Política Nacional y pretendo desarrollar esta columna ese sentido.
Primeramente es importante destacar nuestro repudio a todo acto que pretenda generar desestabilización a través del llamado a la rebelión popular, con el objetivo de instigar la intervención de las Fuerzas Armadas, lo quesólo puede llevar a un enfrentamiento civil de resultados dramáticos.
La realización del referéndum revocatorio en el marco de las normas constitucionales, legales y reglamentarias de la República Bolivariana de Venezuela, puede resultar un mecanismo idóneo para procesar las diferencias políticas. Pero sin reconocimiento mutuo por parte del Gobierno y la oposición del papel de cada uno y con la voluntad política de buscar acuerdos, difícilmente se podrá encauzar soluciones estables y duraderas.
Cualquier intervención externa que no esté dirigida a acercar a las partes en la búsqueda de una solución política acordada, sólo puede agravar las tensiones existentes, además de afectar el principio de no intervención y autodeterminación. Por lo tanto la búsqueda del acuerdo debe ser inclusiva y sin exclusiones.
Trabajar fuertemente paraevitar el incremento de la tensión y los enfrentamientos en Venezuela, es un imperativo de todos los sectores democráticos de la sociedad venezolana, de la región y del mundo.
En ese sentido es que se respalda la mediación que, en representación de UNASUR, realizan los ex Presidentes Leonel Fernández, Martín Torrijos y José Luis Rodríguez, Zapatero y el representante del Vaticano, Nuncio Emil Paul. En este contexto creemos de vital importancia la defensa a ultranza de los gobiernos electos por el voto popular, como de igual manera la reivindicación total de la libertad, la democracia y soberanía de nuestros pueblos Latinoamericanos.