Es posible que hayas escuchado que el hígado ayuda a eliminar sustancias como el alcohol del cuerpo. Sin embargo, suceden muchas más cosas en este órgano, que realiza más de 500 funciones para su cuerpo. Las funciones del hígado incluyen, entre otras, el filtrado de sangre, el procesamiento de la glucosa, o azúcar en la sangre, la producción de bilis, que ayuda a la digestión, o el almacenamiento de vitaminas y minerales, incluidas las vitaminas A, D y E y los minerales hierro y cobre.
Dado que el hígado es un órgano tan importante, tiene sentido tratar de comer alimentos que lo mantengan saludable y evitar alimentos o bebidas que impidan su capacidad para funcionar correctamente. Una dieta saludable y respetuosa con el hígado puede ayudar a controlar o reducir el riesgo de sufrir ciertas enfermedades. ¿Qué comer, entonces, para cuidar el hígado?
Café: El café puede reducir el riesgo de sufrir una enfermedad hepática crónica, cirrosis e incluso cáncer de hígado, según algunas investigaciones. El café ayuda al hígado al bloquear la producción de grasa y colágeno. Además, el café tiene un antioxidante que combate el envejecimiento llamado glutatión.
Pescado graso: Los pescados grasos suelen tener un alto contenido de un tipo de grasa «buena»: los ácidos grasos omega-3, que ayudan a reducir los triglicéridos, un tipo de grasa en el cuerpo que puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades del corazón. Toma salmón, anchoas, arenques, sardinas, truchas, atún…
Vegetales crucíferos: Las verduras crucíferas incluyen el brócoli, las coles de Bruselas y la coliflor. Este tipo de verduras son buenas para el hígado porque tienen fibra, que puede ayudar con la digestión. También tienen compuestos que podrían ayudar a retrasar el desarrollo del cáncer de hígado.
Frutos secos y legumbres: Las nueces y las legumbres (una categoría que agrupa los porotos, las lentejas, las judías y los maníes, que en realidad no son nueces) tienen un alto contenido de compuestos vegetales saludables y el antioxidante vitamina E. Esto es útil no solo para el hígado, sino también para el corazón.
Aceite de oliva: Al igual que los pescados grasos y las nueces, el aceite de oliva virgen extra se une a la lista de alimentos para tener un hígado saludable porque contiene ácidos grasos insaturados con múltiples beneficios para la salud.
Agua: Beber agua es bueno para muchos órganos del cuerpo, incluido el hígado. El agua ayuda al cuerpo a digerir los alimentos más fácilmente y eso ayuda al hígado a hacer su trabajo.
Bayas:
Arándanos, moras, frutillas, frambuesas: todas las bayas pueden mejorar la salud de tu hígado porque están llenos de antioxidantes, que incluyen vitamina C, y las bayas tienen un alto contenido de agua. Todas esas cualidades pueden contribuir a un hígado fuerte. Las bayas también tienen polifenoles.