Las playas representan un placer para los bañistas pero también un estrés para los salvavidas, ante las tristes estadísticas de muerte por ahogo en las costas del mundo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el ahogamiento es la tercera causa de muerte por accidente en el mundo, la primera de muerte infantil entre niños de uno y cuatro años y la segunda entre niños de cinco y nueve años.
Es más, un informe global de la OMS señala que cada año se ahogan unas 372,000 personas.
Si bien el riesgo de ahogarse se ve reducido cuando hay salvavidas cerca, éstos solo pueden vigilar cierta área de la playa y, además, son humanos, con todo lo que ello implica (cansancio tras ciertas horas, limitación física, etc).
“Esos datos son los que nos empujaron a crear un sistema salvavidas”, indicó Netanel Eliav, gerente de la startup israelí Sightbit, inventores de un sistema
basado en visión computarizada que advierte a los salvavidas cuando algún bañista está en peligro.
SALVAVIDAS: ¿CÓMO FUNCIONA EL SISTEMA DE SEGURIDAD?
A través de un sistema de cámaras en la playa que utilizan la tecnología de Sightbit, los salvavidas ven en unas pantallas dentro de sus cabinas una panorámica del agua, de la playa y de los bañistas, que les permite llevar a cabo rescates rápidos o evitar que situaciones peligrosas escalen.
Los algoritmos de la startup analizan las imágenes en tiempo real y cuando el sistema detecta alguna amenaza, como una corriente de agua fuerte o un menor solo en el agua, despliega una señal de alarma en la pantalla o una señal auditiva. Las imágenes de la cámara son enviadas a una unidad de procesamiento, ya sea en la propia playa o en la nube, donde el software de la empresa analiza el flujo de imágenes.
El sistema puede ser personalizado para que cubra una porción de playa específica y alerte según las preferencias del salvavidas.
Si éste quiere saber cuándo una persona está en aguas profundas o cuando un menor entra en el agua, el sistema puede ser programado para advertirle. A
su vez, ofrece alertas visuales como líneas que marcan fronteras o áreas o cajas rojas intermitentes que siguen a una persona específica.
Sus creadores señalan que no se trata de un producto que manda notificaciones a los salvavidas, sino que va a revolucionar el mundo del rescate.
También dicen que supondrá un ahorro para la administración playera, permitiendo cubrir mayores zonas con menos salvavidas. Estiman que en Estados
Unidos ahorre unos 2 mil millones de dólares.
Por ahora está en fase de investigación y desarrollo, con un piloto en funcionamiento en la playa israelí de Ashkelon y dentro de poco en diferentes playas
de Estados Unidos, empezando por Miami.