Estuvo en Tacuarembó el precandidato presidencial, Oscar Andrade. Previo al acto realizado en la avenida Pablo Ríos, dialogó con El Avisador sobre varios temas, entre ellos su postura con referencia a la situación en Venezuela, el acuerdo marco con UPM y la problemática que se vive hoy en San Gregorio de Polanco.
Escribe: José Esteves
¿Qué postura tienes referente a lo que está sucediendo en Venezuela?
“Yo creo que lo que sucede en Venezuela está muy relacionado a los temas de la geo-política, pues no me convence que Estados Unidos, que hace pocos días tenía a niños enjaulados, ahora esté preocupado por los Derechos Humanos en Venezuela, y creo que lo hace porque Venezuela es la mayor reserva petrolera del mundo y hay sectores económicos muy importantes que les sirve la crisis institucional. La mejor salida para Venezuela es construyendo mecanismos de diálogo y América Latina tiene que haber aprendido a donde nos llevan las intervenciones”.
En la interna del FA se habla de un mano a mano entre Carolina Cosse y Daniel Martínez. ¿Cómo toma usted esa situación?
“Mirá, el consuelo de los meteorólogos son las encuestas de opinión pública, porque no embocan una, porque trabajan con condiciones que no son las ideales y se conforman con las encuestas y las encuestas de las internas son las tumbas de los crack, porque no hay una que haya acertado. A esta altura, en la elección pasada Lacalle Pou estaba de recorrida y uno se preguntaba para qué sigue, si las encuestas le daban un 14% contra un 70% de Larrañaga. No le hizo caso a las encuestas y ganó la interna. Creo que la definición política de la elección interna en el Frente Amplio se va a definir en el último mes y medio de campaña entre los cuatro candidatos, y para mí está abierta.
¿Qué nos puede decir del programa electoral del Frente Amplio?
“El programa es único en la fuerza política, lo que puede variar son los acentos. El programa establece la duplicación de la inversión en viviendas y creo que, haciendo un balance autocrítico, con los recursos que estamos contando con MEVIR, con el Plan Juntos y con el sistema cooperativo, no alcanza para solucionar un problema estructural. Nosotros debemos asumir que hay que resolver un conflicto con el sector inmobiliario que es el que genera la especulación y concentra el problema de la crisis urbana, que son barrios privados por un lado y asentamientos por otro lado. Construir viviendas es parte de la solución, pero no podemos construir viviendas de pobres para pobres, sino que tenemos que tratar de solucionar el derecho de los pobres a vivir en la ciudad y para eso necesitamos un respaldo social importante”.
De cara a las elecciones presidenciales. ¿Usted tiene algún referente político que sirva como ejemplo a nivel nacional o internacional?
“Te voy adelantar algo. Si yo ganara las elecciones la primera reunión que tendría es con Elena, la compañera de Marcos, porque al primer compañero que iría a buscar sería a Marcos Carámbula, que hoy está al frente de ASSE. Desde el punto de vista de articular la claridad política y la gestión, creo que Marcos Carámbula es el hombre”.
¿Qué nos puedes decir en cuanto al acuerdo entre el Poder Ejecutivo y UPM tomando como referencia las reinvindicaciones sindicales del SUNCA?
No estamos de acuerdo en algunos puntos, porque incorporan cosas que no se habían conversado con el movimiento sindical. El acuerdo tiene componentes que no compartimos y por eso no lo firmamos, entre ellos la limitación de derechos sindicales. Podemos discutir la prevención de conflictos, pero no me vengan con un sistema que satanice a la organización sindical, o sea que ir a una redacción que establezca que los sindicatos son una especie de organización terrorista, ni un minuto. Tenemos que tener obligaciones compartidas, primero debe haber un compromiso de ambas partes y en ese camino podemos discutir.
¿Tienes alguna postura en cuanto a la situación de la COTA 81 del Río Negro en San Gregorio de Polanco?
“Sé que hay un problema ambiental muy duro y que es una decisión que no ha sido tomada; por lo menos eso me dijeron, que hay un debate interno. Hoy la COTA está casi en 81, generando los problemas ambientales y repercusiones en la industria turística de San Gregorio”.
“Tendríamos que conversar con ellos. Lo que digo es que hoy tenemos una semana muy complicada, pero hay datos que nos hacen colocar el tema en la agenda arriba de la mesa y de eso no tenemos dudas, pero después debemos ver los elementos técnicos que fundamenten una posición u otra”.
Mientras se espera por esos informes, prácticamente se está eliminando la playa de San Gregorio de Polanco, afectando a los habitantes de esa ciudad, que viven en gran parte de lo que genera el turismo. ¿Hay tiempo?
“Si ése es el resultado, claramente no voy a estar de acuerdo, pero quiero comprobar realmente cual va a ser el resultado final”.
Si no sabe, va a tener que ir y darse una vuelta por la playa.
“Si me invitan iré con gusto, es un lugar precioso (risa), y si no encuentro playa va a ser un problema. Nosotros tenemos que incorporar los temas ambientales a la agenda: el Río Santa Lucía está muy complicado, y hoy se está produciendo alimentos para 30 millones de personas, o sea que, si multiplicamos nuestra capacidad de producción, en poco tiempo eso también va a generar problemas ambientales muy grandes”.