Tacuarembó se caracteriza por un importante movimiento cooperativo, sobre todo el de la construcción de viviendas. Grupos de personas se unen con el objetivo de construir su complejo habitacional a través de éste sistema.
Es así que hay varias cooperativas que están el proceso de construcción en diferentes puntos de nuestra ciudad. Una de ellas es COVIFUTAC, Familias Unidas Tacuarembó.
Dicha cooperativa está ubicada en la Av. República Argentina y la Calle Alfredo Zitarrosa, avanza en su construcción, cumpliendo los plazos establecidos en el marco del proyecto presentado al Ministerio de Vivienda, el cual realiza la entrega del dinero, a través de la solicitud del préstamo, al cual se accede mediante sorteo, luego de cumplir con una serie de requisitos y comprobación de documentos.
Este complejo habitacional está compuesto por 42 viviendas, en formato dúplex de dos plantas. El sistema de construcción es por ayuda mutua, debiendo cumplir los socios 88 horas mensuales, a las cuales asisten los titulares o integrantes del núcleo familiar. También se coordinan las instancias de guardia que deben cumplir los integrantes de la cooperativa.
Se estima que la obra estaría totalmente culminada a finales del año 2018, cumpliendo así con el plazo establecidos por el Ministerio de viviendas y la cooperativa.
Actualmente los socios realizan su aporte del pago de la cuota social mensual y próximamente anunciarán nuevos beneficios así lo ha expresado Matías Lara integrante COVIFUTAC.
Sobre el sistema Cooperativo en Uruguay
Sistemas cooperativos de viviendas en Uruguay En el marco del estudio en este ensayo, no referiremos sucintamente a los aspectos esenciales que caracterizan al sistema cooperativo de vivienda uruguayo, para dar una visión general acerca de en qué consiste y cuáles son sus principales virtudes. Las cooperativas de vivienda supones un subsistema colectivo y organizado de lo que en
Latinoamérica se cómo conoce como “producción social del hábitat”, definido por Enrique Ortiz como:
“todos aquellos procesos generadores de espacios habitables, componentes urbanos y viviendas, que se realizan bajo el control de autoproductores y otros agentes sociales que operan sin fines de lucro.
Las modalidades autogestionarias incluyen desde la autoproducción individual espontánea de la vivienda hasta la colectiva que implica un alto nivel organizativo de los participantes y, en muchos casos, procesos complejos de producción y gestión de otros componentes del Hábitat”
. Contexto del sistema cooperativo Hacia 1966, surgen las primeras experiencia sobre el sistema cooperativo de vivienda en Uruguay, promovidos por el CCU (Centro cooperativista Uruguayo) cuyo éxito es el antecedente que más tarde será el origen formal e institucionalizado del modelo posterior, y se da con la
“Ley Nacional de Vivienda” aprobada en 1968, para enmarcar y promover los programas de vivienda social. En el marco jurídico que crea y promueve esta ley incluye a las cooperativas de viviendas según los principios del cooperativismo, y las define como sociedades que “tienen por objeto principal proveer de alojamiento adecuado y estable a sus asociados, mediante la construcción de viviendas por esfuerzo propio, ayuda mutua, administración directa o contratos con terceros, y proporcionar servicios complementarios a la vivienda”.
El primer punto que queremos destacar es que el modelo cooperativo se incluye en la ley para dar solución para el hábitat a los sectores de la población que por la situación económica se ven impedidos de acceder a una vivienda de las que oferta el mercado, siendo la vivienda un derecho de las personas por el solo hecho de ser persona. Por esto, el rol del Estado es esencial, porque se encarga de supervisar y financiar las viviendas, en cumplimiento de garantizar a los ciudadanos el derecho a una vivienda digna . A través del banco de tierrasdel Estado, una vez que las familias reciben el crédito, acceden a un terreno de uso urbano, provisto de los servicios necesarios para la construcción de una vivienda. Siendo este mecanismo el punto de partida para el crecimiento de una ciudad de acuerdo a lo que planifica, y evita la segmentación de estas familias en situación desfavorable se asienten en las periferias. La autogestión y la solidaridad representan los pilares en los que se fundas los sistemas cooperativos. La propia gente es la que se organiza y que toma las decisiones, movida desde una base de una necesidad común, para resolverla de forma colectiva.