Edil Nelly Castro
En el comienzo de la presente década y en casa de un vecino del Barrio Charrúa se reunían con la Vicepresidente de la Agencia Nacional de Vivienda sra. Cristina Finn, un grupo de moradores del Barrio Bella Vista RC6, sus mayores inquietudes eran el saneamiento y la regularización del complejo.
Quiero decir en este momento que no es la primera vez que me ocupo del tema, tal vez no sea la última y quizás me reitere en algunos dichos; me disculpo por ello.
Como pudimos y durante seis o siete años hemos tratado de ayudar de la forma que creímos era la mejor. No estuve nunca sola, fuimos dos compañeras y un abogado que realizó un trabajo encomiable, tramitando la “Auxiliatoria de Pobreza” para todos ellos.
Luego de mucho trajinar y preguntar, logramos dar, hace dos años con la oficina donde estaba la carpeta del RC6 en el Banco Hipotecario y con la profesional a cargo pudimos interiorizarnos. La verdad que la misma contaba con muy poca documentación y le contamos algo de la historia de esta gente a la escribana a la cual prometimos arrimarle copia de cuanto documento consiguiéramos y así fue; material, al decir de ella, de mucho valor y totalmente desconocido. Esto ayudó al Banco Hipotecario a agilizar los trámites internos para luego trasladarlo a la Agencia Nacional (Poder Ejecutivo) es la única autoridad para, mediante un Fideicomiso, perdonen mi ignorancia, solo sé que es una figura legal, que permitió que al día de hoy las viviendas puedan ser escrituradas.
Volviendo a la historia de las familias, les cuento que el fin fue quitarlos de sus hogares para así quedarse con los terrenos (de buen valor) y con la excusa de que “afeaban” el paisaje frente al flamante Parador Municipal ONDA; en aquellos años se los presionó y familias enteras se sintieron amenazadas por el traslado al RC6.
Con aquellas viviendas que no fueron ocupadas por los desplazados, se hizo un llamado a familias de empleados del Municipio de la época, seleccionados por la Asistente Social por su condición de necesidad y se realizó un sorteo con escribano presente; debe de haber sido lo más prolijo de todo esto.
Lo que les voy a contar, un ejemplo entre varios, me da al cabo de 37 años mucha vergüenza ajena por el proceder de los actores políticos del momento. Una familia propietaria del terreno donde construyeron su hogar y según recuerdan con mucho cariño lo hicieron, se les hizo firmar un documento en el cual aceptaban ceder los derechos posesorios a la Intendencia de Tacuarembó. En ese tiempo estaba al frente de la misma el señor Norberto Bernachín, representante de los dictadores de turno.
Bueno, a todos se les hizo firmar la renuncia a sus derechos posesorios. Tras esta aclaración, sigo con la anécdota documentada del abuso que fue objeto esta familia; al menos es mi lectura del documento.
¿Cómo explicar sino la siguiente situación?. El bien fue tasado por la Intendencia en 460 Unidades Reajustables y la vivienda del RC6 que es de muchísimo menor valor, también en la misma cantidad, 460 Unidades Reajustables. O sea que le fue cambiada, como decimos comúnmente: “pelo a pelo”, pero, en el mismo papel se obligaba a los vecinos a concurrir al Banco Hipotecario a regularizar y pagar la vivienda según el convenio. Inaudito. ¿Verdad?. Y nadie fue indemnizado, nunca. No es la única historia, hay tantas como familias son.
Tomando el promedio de valores de uno de los padrones, su tasación es de $ 128.000 y la deuda de contribución inmobiliaria es de $ 320.000, dos veces y media el valor de la vivienda.
Las viviendas son 25. Si tomamos la deuda en dólares y la comparamos con algunos grandes deudores, sobre todo de deuda de contribución rural, con uno o dos de aquellos que paguen se podría exonerar a estas 25 familias.
En documentos oficiales de la Intendencia figura como contribuyente para el pago de los tributos el “Consejo Local Autónomo de Paso de los Toros; o sea que la deuda generada se podría interpretar que sería de ellos mismos.
Sólo hace falta un poco de sensibilidad, ponerse en el lugar del otro, de estas familias que luego de casi 38 años de penar y de recibir cuentos de todos los colores y compromisos de las Autoridades Municipales de turno, hoy pueden ver algo de luz sabiendo que la carpeta está.
Se necesita la iniciativa del Ejecutivo Departamental para exonerar el total de todas las deudas. Descuento que este Cuerpo acompañará, llegado el momento, como en otros casos, la iniciativa del Ejecutivo. Ese día sentiré verdadero orgullo de pertenecer al mismo.