En poco más de una hora, el presidente Luis Lacalle Pou le presentó las bases de la Rendición de Cuentas a sus ministros, repasó los énfasis de los proyectos presupuestales anteriores y pidió a los ministros derribar el mito de que su gobierno no aumentó el gasto. «No es un gobierno que gasta menos sino mejor», fue una de las frases utilizadas por el mandatario en una presentación que no tuvo sorpresas pese a que es la última instancia en la que se puede aumentar el gasto en esta administración.
El foco de esta Rendición de Cuentas, tal como había adelantado en un almuerzo de ADM a mediados de marzo, estará en la salud mental y las adicciones con un programa interinstitucional que tendrá una inyección de US$ 20 millones, el único incremento de gasto anunciado para el proyecto que debe ingresar al Parlamento antes del 30 de junio.
En un contexto de baja en la recaudación principalmente por la sequía que afecta al país, el mandatario le pidió a los ministros que ejecuten el dinero que ya tienen asignado y recordó que los principales incrementos presupuestales se realizaron en instancias anteriores de rendiciones de cuentas, cuando el foco estuvo en la primera infancia y cuando se asignaron los recursos para el Plan Avanzar vinculado a la erradicación de asentamientos. También resaltó la inversión del Ministerio de Transporte y, si bien el tema del agua salada no estuvo sobre la mesa, destacó las dos inversiones vinculadas al tema que el Poder Ejecutivo tiene previstas: el proyecto Arazatí y el saneamiento.
Más allá de lo previsto para esta instancia, el proyecto votado en 2022 tenía un incremento de gasto ya pautado para 2024 de US$ 337 millones. El grueso de ese dinero –US$ 141 millones– se destinarán a salarios del sector público, tras el acuerdo alcanzado con COFE. Habrá US$ 55 millones que irán a educación, US$ 36 millones a políticas de salud y US$ 22 millones a seguridad. Lo restante se divide en diferentes políticas públicas.
El programa vinculado a la salud mental estará coordinado entre Salud Pública, el Ministerio de Desarrollo Social, la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) y la Junta Nacional de Drogas. En la reunión de este miércoles, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, pidió la palabra y dijo que le gustaría participar del programa ya que las adicciones suelen ser un problema muy importante en las cárceles que generan un círculo vicioso y, por lo tanto, un problema de seguridad.
«La adicción lleva a que los presos sean agentes de una red de narcotráfico con la que estamos luchando mucho. Los esfuerzos en destinar recursos por US$ 20 millones para atender como nunca antes a la salud mental y adicciones para el Ministerio del Interior es fundamental», dijo Heber en rueda de prensa tras el consejo.
En el consejo, la línea del presidente fue retoma-da por la ministra de Economía, Azucena Arbele-che, que con el respaldo de una gráfica, aseguró que en cada uno de los años de este gobierno hubo aumento de gasto. La jerarca hizo mención a la baja en la recaudación pero destacó que, pese a la pandemia y la sequía, el gobierno siempre gastó más que en 2019 y resaltó el comienzo de la recuperación salarial tanto en el sector público como en el privado, más allá de los incrementos adicionales dados al Ejército y la Policía.
A nivel político, el presidente pidió «estar alineados» para votar el presupuesto y fue el ministro de Defensa, Javier García, que pidió una «mejor sintonía» entre las bancadas y los cargos ejecutivos para poder avanzar con mayor armonía.
Solución para deudores del BHU
Una de las novedades de la jornada fue que Lacalle Pou anunció que iniciará una ronda de contactos partidarios para buscar una solución para los deudores del Banco Hipotecario (BHU). Si bien no adelantó detalles sobre lo que tiene en carpeta, dijo que si les da el tiempo lo incluirán en la Rendición de Cuentas.
Ya el 2 de marzo, en su discurso ante la Asamblea General, el presidente había reconocido que estaba «en falta» con este tema porque había asumido un compromiso en campaña pero que el paso del tiempo era para «tener una mejor solución». En aquel entonces dijo que «en las próximas semanas» iban a haber noticias formales.
Sin embargo, el tema recién volvió a aparecer en el Consejo de Ministros de este miércoles. Además de los líderes partidarios, el presidente adelantó que también se pondrá en contacto con los legisladores que impulsaron proyectos sobre este tema. Los deudores que reclaman una solución son alrededor de 7 mil y están endeudados en Unidades Reajustables (UR).
El Observador