Escribe: José Esteves
El candidato a presidente de la República, Edgardo Novick, estuvo en Tacuarembó recorriendo algunos barrios de la ciudad y zonas rurales. Durante su corta estadía en la capital departamental, mantuvo una enrevista con nuestro cronista Esteves en el cual sostuvo que él es “el único que se enfrenta al Frente Amplio”, (¿?) y abordó varios temas de la actualidad, entre ellos la puja electoral y la política en seguridad.
A un año de las elecciones nacionales el Partido de la Gente tendrá su primera experiencia electoral. ¿Cómo se siente en la recorrida por el interior del país?
“Estamos continuamente recorriendo el país y aprendiendo mucho. Las giras nos sirven para organizarnos como estructura y estamos muy confiados en nuestra propuesta, creciendo como una bola de nieve y cada día se va uniendo más gente. Se nos han sumado frenteamplistas, blancos, colorados y personas independientes, gente que ha estado en la política y otros que nunca lo han estado, que son asesores, técnicos, con los cuales conformamos 26 equipos de trabajo para trabajar en los temas más importantes para el país”.
¿Ideológicamente dónde se ubica el Partido de la Gente?
“Yo creo que en el mundo actual la discusión no está entre izquierda y derecha. La discusión es entre el que hace las cosas mal y el que hace las cosas bien. Están los que mal administran y despilfarran y los que hacen una buena gestión. La discusión es entre la corrupción y la honestidad, y para mi, si distribuir mejor entre los que menos tienen es ser de izquierda, somos de izquierda, y si es dar una mejor educación a los chicos de las familias más humildes es ser de izquierda, somos de izquierda, pero ahora si dar una lucha firme contra la delincuencia y dar una batalla contra el narcotráfico y la corrupción es ser de derecha, somos de derecha”.
¿Pero cómo hace para captar al elector del Frente Amplio, del Partido Colorado o del Partido Nacional? Para ganar debe nutrirse de esos votos sí o sí.
“Yo creo que en el futuro, la gente, los uruguayos, no van a votar más con la camiseta de determinado Partido Político, sino que van a elegir al mejor candidato, el que está más preparado y el que formará los mejores equipos en gestión, administración y trabajo. Para mí las tres condiciones fundamentales es que sea una persona capaz, trabajadora y honesta, y con eso formamos a nuestro equipo”.
En los últimos meses aparecen dos figuras en el Partido Colorado, como Ernesto Talvi y el ex presidente de la República, Julio María Sanguinetti. ¿Crees que puede incidir electoralmente la aparición de esas dos figuras?
“Mire, yo que creo que el Partido de la Gente y yo en particular, soy el único que me estoy enfrentando al Frente Amplio. Talvi, Sanguinetti o los blancos son más de lo mismo, pues yo les he propuesto hacer una coalición, a Lacalle Pou, a Sanguinetti, a Talvi y a Larrañaga y me han dicho que no. En el Frente Amplio piensan diferente pero votan juntos, y en la oposición queremos pensar parecido y votamos separados, y en el balotaje ya perdieron Lacalle padre y Lacalle hijo, y creo que si nos juntamos podemos ganar en la primera vuelta”.
¿Crees que puede haber un cambio en el mapa político, debido a las elecciones en Argentina y en Brasil?
“Si. Los electores del Frente Amplio están en contra de la corrupción, pero se olvidaron de la gente, no recorren los barrios y están cuidando sus carguitos. Los políticos del Frente Amplio defienden la corrupción en Brasil, defienden a la dictadura de Venezuela, y se olvidan que sus electores están en contra de eso, están en contra de las dictaduras y de la corrupción. El Frente Amplio nos está dejando sin educación, sin atención de salud, sin políticas sociales, sin trabajo y con la mayor crisis de seguridad, y sus electores se sienten traicionados, porque ellos lucharon por lo que lucho yo ahora”.
¿Si te toca ser presidente de la República, cuál sería la primera medida que tendrías que tomar por el bien del país?
“Los uruguayos nos conformamos con pocas cosas pero que son importantes. Tenemos que tener buena seguridad, vivir tranquilos, que nuestros hijos y nietos tengan una buena educación, tener un buen sistema de salud y trabajo, pero hoy eso no existe”.
“En nuestro país estamos viviendo la mayor crisis en la seguridad de nuestra historia, con 30.000 rapiñas anuales, 150.000 hurtos, casi 400 asesinatos, y están robando a la gente humilde, a los trabajadores. Nos roban los documentos, la poca plata que tenemos en el bolsillo, las garrafas, los championes, y mucha gente ya ni siquiera denuncia”.
“En la educación pasamos, de tener una de las mejores del mundo a ser una de las peores, y en la salud se está muriendo gente pobre por no ser atendida a tiempo”.
“A todo esto debemos sumar la gente que se está quedando sin trabajo, con 12 mil pequeños productores que se fundieron y con más de 55.000 puestos de trabajo perdidos en un año”.
¿Pero cuál es el tema principal a abordar si le toca ser gobierno?
“El tema principal es la seguridad. La gente pobre me dice que les brinde seguridad, porque para qué vamos a trabajar si nos roban lo poco que tenemos. La gente no puede seguir viviendo así, no puede caminar tranquila por la calle, no sabemos cuándo nos va a atacar el narcotráfico, hay que ser firme con eso y por eso estamos formando los mejores equipos”.
Siguiendo la línea de la seguridad. ¿Usted está de acuerdo con la reforma Constitucional que impulsa el senador Jorge Larrañaga?
“No, porque nosotros queremos a los mejores trabajando por la seguridad. Fuimos a buscar a Robert Parrado que tiene 30 años trabajando como especialista en combatir a la delincuencia en la calle. Trajimos al Fiscal Zubía que nos va a ayudar con un grupo de asesores para cambiar las leyes, con el objetivo de que los delincuentes estén todo el tiempo necesario en las cárceles hasta ser rehabilitados”.
“No conforme con eso, me fui a buscar a Giuliani y su equipo, que terminaron con la inseguridad en Nueva York. Nosotros vamos a hacer una propuesta y a poner a las personas más capaces, cosa que no sucede hoy. Y si me toca ser presidente, le voy a ofrecer a Manini Ríos que sea nuestro ministro de Defensa”.
¿Pero por qué motivo no está de acuerdo con la reforma que impulsa Alianza Nacional?
“Le explico. Los militares no están preparados para trabajar de policías. Son educados y capacitados para otra función, y con la reforma de Larrañaga serían militares bajo el mando de Eduardo Bonomi, que es el verdadero problema”
“Es una persona que no es capaz de manejar el problema. Nosotros pensamos que las Fuerzas Armadas deben estar a cargo de las cárceles, para que no ingresen las drogas, las armas y los celulares a los recintos, y para que los privados de libertad hagan deportes, trabajen y sean rehabilitados de verdad. En cuanto a los policías que hoy trabajan en las cárceles, los pondría a patrullar y a hacer su función y trabajo de policías”.