Se desarrolló una nueva instancia de “Visión 2050: Tacuarembó en la Región Norte” cuyo objetivo es pensar los posibles escenarios futuros del departamento para el año 2050.
Dicho proceso supone identificar los principales desafíos a afrontar para conseguir el escenario deseado en dicho horizonte temporal.
Se trabaja en tres aspectos desde lo social, económico y lo ambiental en una temática de mesas de planteos de lo realizado hasta el momento desde que se comenzó en el proyecto, con la participación activa de los representantes de las Instituciones involucradas.
Se contó con la presencia de Fernando Isabella director de OPP, Oficina de Planeamiento y Presupuesto de Presidencia de la República
Fernando Isabella Director de OPP, en diálogo con El Avisador expresó: “ es una instancia mas de este proceso para generar una visión de Tacuarembó al 2050, ya hace un año que estamos trabajando, esta es la última instancia participativa, lo que se busca es generar lineamientos estratégicos para lograr el futuro deseado, lograr el cumplimiento de algunas hipótesis que se definieron en las distintas áreas que se están trabajando, que son fundamentalmente lo económico, lo social y lo ambiental. En las instancias anteriores fue pensar metas deseables, posibles que sean desafiantes, que vayan de la mano con el desarrollo sustentable de Tacuarembó en esta visión regional. Es una experiencia interesante de trabajo interinstitucional, entre el Gobierno Nacional con la Intendencia, la Universidad, la sociedad civil, la Mesa de Desarrollo Local. Hay un conjunto de actores que han participado y han mostrado mucho compromiso “
Cómo se ve el futuro desarrollo del Departamento?
– Con algunas cosas muy primarias, lo que se ve y ven los participantes es que hay optimismo en las áreas económicas, se considera relativamente probable el cumplimiento de las metas establecidas a nivel económica, se observan que hay recursos naturales que con el tiempo se van a valorizar, el mundo cada vez más va a valorar la producción de alimentos, la disponibilidad de agua y lo que implica para la producción forestal. Hay buenas expectativas de inversiones extranjeras que colaboren en el proceso de desarrollo. Pero hay una visión no tan positiva en términos sociales, lo que se percibe que si bien es posible lograr esas metas económicas eso no implica una mejora para todo el mundo. Por lo tanto es necesario establecer políticas que permitan redistribuir esa riqueza generada para beneficio de todo, ese es un primer lineamiento”.